Ayudar con lo propio
Como parte de sus acciones de responsabilidad social, muchas empresas eligen colaborar a través de sus productos y servicios
Cada vez más empresas están en línea con una política de sustentabilidad. Algunas eligen desarrollarla desde sus propios saberes y áreas de trabajo, facilitando el acceso a los productos o servicios que ofrecen.
Quizás el caso más paradigmático sea el Programa de Gasificación Integral que lleva adelante desde 2001 Gas Natural Fenosa en alianza con la Fundación Pro Vivienda Social en Moreno, al oeste del conurbano bonaerense. Con la idea de llevar la red de gas natural a los barrios humildes ya han beneficiado a más de 4800 familias, que representan más de la mitad de la población de la localidad y hoy es el principal programa de la fundación y uno de los más importantes de responsabilidad social de la empresa.
"La relación surgió cuando un grupo de vecinos de Moreno solicitó a la Fundación Pro Vivienda Social que los ayudara a acceder a los servicios básicos. La fundación evaluó que el servicio de gas era el único que estaba garantizado. Con ese mandato y análisis, el proyecto se presentó en el Área de Moreno, para solicitar el servicio para 4000 vecinos de cinco barrios", explica Raúl Zavalía, director de la Fundación Pro Vivienda Social. La primera experiencia se realizó en el barrio Cuartel V a través de la figura legal del fideicomiso.
Allí comenzaron a trabajar juntos los vecinos, la fundación y la empresa a través de un modelo de gestión basado en la organización barrial, la participación solidaria y la garantía colectiva para el pago de la obra, que es la base sobre la que se sustentan luego los aspectos técnicos, operativos y legales. "Buscamos crear un programa a través del cual los vecinos pudieran pagar la instalación de la red con la plata que se ahorraban al usar el gas natural, que es más barato que el envasado", explica Bettina Llapur, directora de Comunicaciones de Gas Natural Fenosa Argentina, que agrega: "A la empresa le conviene tener más clientes y a los usuarios, el acceso al servicio les significa una mejor calidad de vida y un ahorro económico".
"Mejora la calidad de vida en el sentido de la calefacción y de la cocción de los alimentos", explica Daniel Carballo, uno de los primeros vecinos que empezó con el tema del gas en el barrio 25 de Mayo, y agrega: "Un problema que se da con frecuencia es que la garrafa se te acaba siempre de noche o un día de lluvia, y tenés que salir a buscar dónde comprar otra a esas horas de la noche. Además está el problema del precio. El beneficio del proyecto también es económico".
Para Horacio Cristiani, presidente de Gas Natural Fenosa Argentina, quien quiere que este proyecto que está a pleno en varios barrios de Moreno y que ya llegó a La Juanita en La Matanza y Las Tunas en Tigre, continúe expandiéndose, además del mejoramiento de su calidad de vida, la gasificación de estos barrios les significa a las miles de familias allí radicadas, reconocimiento e integración social.
"Ha sido fundamental el trabajo con Pro Vivienda Social, sobre todo en lograr la cohesión social para poder llevar el programa adelante", sostiene Llapur, que agrega: "Creemos que para poder llevar a cabo un buen programa de RSE, con impacto real, es necesario trabajar con una organización social que acerque la empresa a la comunidad". Es que más allá del mejoramiento en la calidad de vida, el programa también ayudó para la unión comunitaria.
Los chicos primero
La niñez y la educación son dos de las temáticas en las que más se enfocan las empresas. LAN Argentina y el Grupo Asegurador La Segunda no son la excepción. En el caso de la aerolínea, desde hace casi 10 años lleva adelante el programa Todos podemos volar, a través del cual permiten realizar un vuelo en avión a los 12 mejores alumnos de 5º y 6º grado de escuelas públicas de algunas de las provincias donde opera la compañía -Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Tucumán, Salta y Misiones-. Así, todas las semanas durante el ciclo lectivo despega un avión transportando a chicos de 10 y 11 años, que son acompañados por docentes de la escuela y voluntarios de LAN.
"Es una gran alegría ver despegar todas las semanas un avión con nuevos niños que están viviendo su primera experiencia de vuelo, resultado de su esfuerzo y desempeño en la escuela", afirma Martín Riverós, jefe de Responsabilidad Social Corporativa y Medio Ambiente. La iniciativa, que comenzó en junio de 2005 y tres años más tarde fue declarada de interés por el Ministerio de Educación de la Nación, ya permitió volar a más de 2200 alumnos y 290 maestros de más de 185 escuelas de bajos recursos, que también pudieron conocer los procesos relacionados con la actividad aerocomercial. En cada oportunidad, los niños recorren las instalaciones del aeropuerto, las oficinas operativas de la aerolínea y realizan el check-in.
Durante el vuelo son asistidos por el personal y una vez aterrizado el avión conocen a los pilotos y acceden a la cabina, además de recibir una charla de introducción al mundo aeronáutico,el turismo sustentable y el medio ambiente. Por su parte, La Segunda creó en 2013 la Escuela de valores para La Segunda oportunidad, que tiene como propósito fomentar en toda la comunidad, pero especialmente en los chicos y jóvenes, la educación en valores.
A través de videos que presenta Manuel Ginobili, esta escuela da visibilidad a las actividades y los programas que realizan los maestros y estudiantes de escuelas primarias, colegios secundarios y universidades de todo el país que permitan dar, a quienes lo necesitan, una segunda oportunidad para recuperarse y salir adelante. Pero además los conecta. Karina Madariaga es profesora de letras y trabaja en escuelas de San Nicolás, en la provincia de Buenos Aires. Desde hace varios años realiza con sus alumnos diversas actividades, como por ejemplo confeccionar sábanas para las incubadoras de los hospitales públicos de la provincia de Buenos Aires. "La Escuela de Valores nos permite socializar proyectos que varios maestros realizamos por nuestra cuenta, para que se conozcan y se puedan replicar", explica Karina, una de las pioneras en poner en marcha el programa Vamos al teatro, a través del cual trabaja textos dramáticos que luego van a ver al teatro con sus alumnos.
"Ya somos 300 profesores que trabajamos así y más de 1500 chicos que llevamos al teatro", cuenta orgullosa. Esta iniciativa cuenta con el apoyo de grupos cooperativos de teatro y generó en San Nicolás una revalorización del género, hasta el punto de que hoy hay varias compañías de teatro independiente y hasta se creó un festival, que tiene mucha afluencia de público. "Además, al contar con el apoyo de La Segunda, que es una empresa muy tradicional de la zona, la gente confía en el proyecto", agrega.
Clics solidarios
Valiéndose de su plataforma de ventas a través de Internet, Mercado Libre creó Mercado Solidario, un programa de promoción de causas sociales que ayuda a que las oSC de América latina encuentren en el comercio electrónico una alternativa para la recaudación de fondos y la generación de recursos económicos a través de la venta de productos propios o recibiendo donaciones de manera gratuita.
Así pueden crear su propia tienda para la venta de productos, recibir donaciones en forma online ofreciendo múltiples medios de pago y difundir sus campañas con publicidad en el sitio de Mercado Libre. "Más de 550 organizaciones utilizan nuestras herramientas como parte de su estrategia de recaudación de fondos", explica Valeria Bazzi, directora de comunicación de la empresa. "En el caso de la venta de productos, las organizaciones aparecen en nuestro sitio de la misma manera y a la par de nuestros clientes habituales, pero de manera gratuita y con el tipo de publicación oro, que es la más destacada", agrega. Las cifras son elocuentes: las transacciones de las organizaciones sociales latinoamericanas durante 2014 superó los 1.500.000 dólares.
Aldeas Infantiles es una de las organizaciones que se sumó a la propuesta. Hace dos años crearon una juguetería virtual para que la gente compre regalos para los chicos que se alojan en las casas de la organización. "Tenemos una plataforma virtual gratuita a disposición, además de asesoramiento y apoyo por parte de Mercado Libre. Para Navidad o el Mundial, por ejemplo, lanzamos una campaña fuerte, con un rediseño del sitio, que fue muy exitosa", afirma Verónica Di Carlo, directora de Recaudación de Fondos de la organización, que en 2014 consiguió a través de esta modalidad, 136 mil pesos que se tradujeron en juguetes para sus niños.