Una cruzada contra la vida sedentaria
Instituciones y especialistas en medicina deportiva proponen una alianza ciudadana para promover el movimiento
Los argentinos no encontraremos la fórmula para hacer descender el riesgo país, pero podemos descubrir la que nos conduce a una vida más saludable. Es sencilla: consiste en dedicar media hora diaria, de una vez o acumulada en tres sesiones de 10 minutos cada una, a la realización de actividad física moderada.
Esto es lo que propone un grupo de instituciones, médicos, psicólogos y nutricionistas que se encuentran reunidos en las Sextas Jornadas Internacionales de Excelencia en Medicina Deportiva y que hoy, a las 17, lanzará el programa nacional ¡A moverse, Argentina!
"Recientes estudios demostraron que la asociación entre actividad física y salud no requiere horas y horas de ejercicios intensos -explica el doctor Jorge Franchella, director del curso de especialistas de medicina del deporte de la Facultad de Medicina de la UBA e integrante del Colegio Americano de Deportología-. La medicina divide a las personas en sedentarios, poco activos, activos y muy activos. La mayor caída en el riesgo de muerte en hipertensos, diabéticos y obesos se da en el paso entre el sedentario y el poco activo: un 34% de reducción."
Campañas nacionales como la Active Living, de Canadá, Healthy People 2000, en los Estados Unidos, Active for Life, en Inglaterra, entre otros, intentan lograr justamente esto, que los individuos adopten un estilo de vida activa en todo momento.
¡A moverse, Argentina! es un llamado a la comunidad para que, cada uno dentro de su ámbito de acción promueva el hábito de realizar 30 minutos de movimiento: empujar el carrito del supermercado, pasear el perro, cortar el pasto, caminar...
"La idea es que para esto no hay que realizar ninguna inversión -afirma el doctor Víctor Matsudo, deportólogo brasileño que puso en marcha esta idea hace cuatro años en San Pablo y actualmente la difunde en toda América-. No se requiere calzado ni indumentaria especial. Basta con bajarse un par de paradas antes de llegar a casa y recorrer el camino restante a pie. Ir a bailar, arreglar el jardín... O subir por la escalera fija y no por la mecánica -se entusiasma-. Cada escalón representa una kilocaloría de gasto. Si subiéramos un piso cada día durante todo el año, bajaríamos un kilo y medio de peso. Si en lugar de uno fueran tres pisos, serían cuatro kilos y medio. Pero no queremos."
Entre otras cosas, especialistas como Matsudo y Franchella están intentando revertir un enfoque de la deportología que se orientaba solamente a los deportistas de alto rendimiento.
Los números que respaldan su razonamiento son contundentes: ni siquiera un uno por ciento de la población puede incluirse dentro de la categoría del atleta. "Es para prolongar la salud del otro 99 por ciento que se lanza este programa. Antes nos preocupábamos sólo del alto rendimiento -dice Matsudo-. Estábamos equivocadísimos."
Por otro lado, es rotundo: la inactividad, afirma, es hoy el mayor problema de salud pública: "Siete de cada diez latinos son sedentarios. Es una epidemia grave, porque el sedentarismo mata. Aumenta la resistencia a la insulina, el depósito de colesterol, la hipertensión, la enfermedad cardiovascular, el infarto de miocardio, la osteoporosis... Además tiene un impacto social y psicológico: disminuye la autoestima e incrementa el aislamiento, el stress y el riesgo de depresión. El poco hábito de actividad física del ciudadano promedio tiene un enorme costo social y personal".
Para cambiar este estado de cosas, en diciembre de 1996 Matsudo lanzó en San Pablo el programa Agita S‹o Paulo, un sistema de alianzas estratégicas que impulsa a realizar actividad física moderada.
"Para combatir el sedentarismo es necesario que toda la sociedad se dé la mano -asegura, con entusiasmo-. Hay que unir todas las fuerzas vivas de la sociedad. En San Pablo tenemos ya más de 150 instituciones hermanas que se sumaron al programa. Por ejemplo, la alcaidía de San Sebastián les ofrece a sus empleados la posibilidad de retirarse 15 minutos antes para realizar actividad física y les pide a ellos que agreguen los otros quince."
Desde hoy, ¡A moverse, Argentina! intentará ofrecer una propuesta similar, basada en los conocimientos científicos de que los ejercicios moderados son igual o más eficaces que los intensos.
Con mensajes como, por ejemplo, "No tenés que hacer mucho para lograr mucho", "Ganás mucho aunque hagas un poco", "Tenés 501 músculos, ¿no pensás mover ninguno? o "30 minutos te cambian una vida" alentarán, sencillamente, a mover el esqueleto .
"Si en lugar de 30 minutos corridos, puedes hacer 10, 10 y 10, el resultado va a ser el mismo -insiste Matsudo-. No sirve para batir récords, pero... ¿quién quiere batir récords?"
Cómo y cuándo
Transporte activo: estacionar el auto lejos o bajarse antes del colectivo para caminar.
Deporte: el que más le guste.
Jardinería: también cuenta como actividad física.
Otras posibilidades: lavar el auto, pedalear, patinar, arrastrar el carrito del supermercado.