Los italianos, no tan machos como parece

SAN LUIS, EE.UU (AP).- La imagen del arrogante macho italiano pareció quedar descartada con un nuevo estudio de los investigadores de la Universidad de Missouri-Columbia, que hallaron que los universitarios italianos al parecer tienen actitudes menos tradicionales que los hombres estadounidenses cuando se trata de la masculinidad.

"Tal como se pensaba, este estudio pone en duda la precisión de los estereotipos estadounidenses predominantes sobre los hombres italianos como patriarcales, machistas, violentos y dominantes, el tipo del mafioso que presentan en el programa de televisión «Los Soprano» y la película «El padrino»´, dijeron los investigadores.

Los científicos realizaron encuestas comparadas entre estadounidenses e italianos y no estudiaron específicamente a los hombres ítalo-norteamericanos. Un grupo de 152 estudiantes varones de universidades públicas de Roma y de Palermo, Italia, respondió a una lista de frases desarrollada en Estados Unidos a fin de estudiar las actitudes tradicionales y no tradicionales sobre la masculinidad.

Las respuestas del grupo italiano resultaron ser menos tradicionales en nueve de los 11 patrones de conducta consideradas masculinas.

Los puntos abarcaban áreas tales como los riesgos que se toman y el control emotivo, e incluso frases como "La violencia casi nunca se justifica" y "Es mejor mantener ocultas tus emociones". Los entrevistados eligieron respuestas que oscilaban desde "estoy muy de acuerdo" hasta "estoy en gran desacuerdo".

David Tager, estudiante de posgrado en Missouri, recogió la información entre los italianos del centro y sur del país mientras vivía en Roma, en 2003. Las respuestas fueron comparadas con una encuesta que se les hizo a 752 estadounidenses.

Los resultados hallados por Tager y el catedrático adjunto de salud y psicología, Glenn Good, serán publicados en octubre en la revista Psychology of Men and Masculinity Journal.

Los universitarios en Italia dijeron que se sienten menos amenazados por el homosexualidad y no definieron su masculinidad -tanto como los estadounidenses- en términos de tener poder sobre las mujeres, según dijeron los investigadores.