La compañía de Elon Musk logró aterrizar con éxito una de sus naves espaciales, después de cinco intentos
La nave no tripulada se elevó diez kilómetros y luego hizo un descenso controlado en la base de la compañía, en Texas
- 2 minutos de lectura'
La quinta fue la vencida para SpaceX, la compañía de Elon Musk. Ya habían sido muchos los videos de las naves espaciales Starship que se habían estrellado sin concretar sus vuelos de prueba, acotados por ahora a un ascenso y descenso rápidos. Ayer, la compañía del dueño de Tesla consiguió un resultado distinto: su prototipo número 15 (SN15) logró elevarse a 10 kilómetros de altitud para luego descender y aterrizar intacta en el suelo de la base que SpaceX tiene en el sudeste del estado norteamericano de Texas.
“Como en otros vuelos de prueba de la Starship, SN15 se propulsó en su ascenso con tres motores Raptor, los cuales se apagaron en secuencia antes de que el vehículo alcanzara su apogeo -a aproximadamente diez kilómetros-. SN15 realizó luego una transición de propulsor a los tanques de cabecera internos antes de reorientarse para la entrada y un descenso aerodinámico controlado”, informó la compañía en un comunicado.
Aunque se trata de un logro histórico, queda chico al lado de las ambiciones que Musk, actualmente el hombre más rico del mundo, tiene para SpaceX en general y para sus Starship en particular: “Estos vuelos de prueba son para mejorar nuestro conocimiento y desarrollo de un sistema reutilizable de transportes diseñado para transportar tripulaciones y cargamentos en viajes interplanetarios de larga duración, ayudando a la humanidad a regresar a la luna, viajar a Marte y más allá”, concluía el comunicado de su empresa.
Previamente, SpaceX había logrado regresar con seguridad a los tripulantes (Crew-1) de otra de sus naves insignias, el cohete Falcon y la cápsula Dragon. Los astronautas, entrenados por la NASA, habían pasado seis meses en la Estación Espacial Internacional ubicada en la Luna, en lo que fue la misión más larga de la historia de los vuelos espaciales tripulados y una de las primeras en las que una compañía privada trabajó junto a la NASA.