Finalmente, la NASA envió la sonda MRO a Marte
La misión recogerá informción sobre el planeta rojo
CABO CAÑAVERAL, EE.UU. (EFE).– La NASA lanzó esta mañana una nueva sonda a Marte que recolectará más información sobre el planeta rojo que todas las misiones realizadas hasta la fecha.
La "Mars Reconnaissance Orbiter" (MRO) fue propulsada por el cohete Atlas V y necesitará siete meses para llegar a su destino.
La agencia espacial estadounidense había aplazado ayer el lanzamiento debido a un problema con los programas informáticos que se utilizan para supervisar los niveles de combustible del cohete propulsor.
La NASA prevé que la MRO pase al menos cuatro años en una órbita de Marte, durante los cuales obtendrá información que se utilizará para decidir dónde colocar los robots exploradores que se enviarán al planeta a finales de esta década.
Datos meteorológicos. Los datos meteorológicos y geológicos que obtenga la sonda también podrían ayudar a la futura exploración humana del planeta.
La sonda ingresará en la órbita de Marte en marzo de 2006 y en noviembre comenzará a explorar la superficie del planeta con la misión fundamental de intentar "comprender los enigmas del agua en el planeta y avanzar en la exploración del misterioso planeta rojo", señala la NASA.
La presencia de agua en el pasado remoto de Marte ya fue constatada durante las exploraciones realizadas el año pasado por los vehículos robóticos "Spirit" y Opportunity".
Investigar la evolución del planeta. La MRO, que pesa más de dos toneladas, llevará seis instrumentos para analizar la atmósfera, la superficie y el terreno debajo de la superficie a fin de conocer la forma en que Marte ha ido cambiando en el tiempo.
Según explicó la NASA, una de las tres cámaras de la MRO será la cámara telescópica de mayor diámetro enviada para estudiar un planeta y con ella podrán observarse rocas y formaciones del tamaño de un escritorio de oficina.
Otros instrumentos incluyen un espectrómetro, el cual identificará minerales relacionados con el agua en áreas del tamaño de un campo de fútbol y un radar suministrado por la Agencia Espacial de Italia que penetra en el suelo y permite la detección de capas de roca, hielo y, si la hubiese, agua.
El "Orbiter" puede transmitir unas diez veces más datos por minuto que cualquier otro aparato enviado previamente a Marte.