Dilemas de alto impacto
No hace mucho, Alain Connes, célebre matemático francés ganador de la medalla Fields, considerada una distinción equivalente al Nobel, dijo durante una entrevista que la unidad de medida en matemática es de alrededor de 10 años: un trabajo de una década de antigüedad puede considerarse reciente. En física, ronda los tres meses, agregó.
Lo cierto es que un paper sobre temas de físicapuede ser citado miles de veces en un lapso relativamente corto, mientras que a uno de matemática le lleva años atraer la atención de los colegas que trabajan en el mismo campo. Y ni pensar en trascender la esfera de los entendidos...
Todo esto no tendría mucha importancia si no fuera porque el número de citas es la medida utilizada corrientemente en el mundo de la ciencia para medir el "impacto" o el "valor" que tiene el trabajo de un investigador, un índice que lo ayuda a avanzar en la carrera y le otorga prestigio.
Se trata de un sistema, sin embargo, que enfrenta críticas crecientes por diversos motivos. Porque... ¿qué vale más: un físico con 70 trabajos publicados o un ingeniero con 20? Dadas las diferencias entre disciplinas, como subraya Connes, la comparación puede conducir a valoraciones sesgadas o francamente erradas.
Otro matemático, el eslovaco Igor Podlubny, de la Universidad Técnica de Kosice, expone en la revista Scientometrics una forma ingeniosa de superar este obstáculo basándose en las relaciones constantes que se establecen entre los números de citas de las distintas ciencias.
Podlubny observó que la razón entre el número de citas de dos campos del conocimiento cualesquiera se mantiene casi constante. Por ejemplo, entre 1992 y 2001, la razón entre las publicaciones de medicina y las de física fue cercana a 4 (por cada cuatro trabajos médicos se publicó uno de física). El cociente entre los de ingeniería y matemática se mantuvo cercano a 5, y algo similar se cumplió para cualquier par de disciplinas listadas en el Science Citation Index.
Teniendo esto en cuenta, el físico con 70 citas tendría un índice de impacto de 3,68, pero el ingeniero con 20, de 4. Con el mismo criterio, según Podlubny, una cita de un trabajo matemático equivaldría aproximadamente a 15 de química, a 19 de física y a 78 de medicina clínica. O, en otras palabras, 250 citas en matemática podrían ser consideradas equivalentes a 3750 citas en química, a 4750 en física y a 19.500 en medicina clínica.
Como suele decirse, al César lo que es del César. Y a "la reina de las ciencias"...