Berlín: descubren un nuevo mineral en un meteorito que cayó de la Luna
Un equipo de investigadores europeos descubrió un nuevo mineral "de alta presión" en el meteorito lunar Oued Awlitis 001, hallado en enero de 2014 en el Sahara Occidental. El descubrimiento fue considerado de gran relevancia por el Museo de Historia Natural de Berlín, que hizo el anuncio a través de su sitio web.
"Desde hace 25 años trabajo casi a diario con meteoritos, pero descubrir un nuevo mineral y verlo por primera vez es realmente una experiencia excepcional", dijo en el comunicado el científico jefe de la colección de meteoritos del museo, Ansgar Greshake.
El nuevo mineral fue nombrado donwilhelmsita, en honor al geólogo lunar estadounidense Don E. Wilhelms, y está compuesto por átomos de calcio, aluminio, silicio y oxígeno (CaAl4Si2O11).
Wilhelms es un reconocido experto que colaboró con la NASA en la elección de los sitios de aterrizaje de las misiones Apollo y en el análisis de las rocas lunares que fueron traídas hasta la Tierra por esas misiones.
"Este meteorito tiene una composición similar a las rocas que conforman los continentes de la Tierra. Los sedimentos erosionados de estos continentes son transportados por el viento y los ríos a los océanos y subsumidos hacia el manto de la Tierra como parte de la densa corteza oceánica", explica el comunicado del museo alemán.
"Una vez arrastrados a profundidades de aproximadamente 460-700 km, sus minerales constituyentes se transforman a altas presiones y altas temperaturas existentes en esas profundidades, en fases minerales más densas, incluido el mineral donwilhelmsita recién descubierto. En el ciclo de las rocas terrestres, la donwilhelmsita es, por tanto, un agente importante para el transporte de sedimentos de la corteza a través de la zona de transición del manto de la Tierra (460-700 km de profundidad)", completa.
La descripción de este nuevo mineral fue publicada en la revista científica American Mineralogist, por los investigadores Jörg Fritz y Ansgar Greshake, junto con colegas del Museo de Historia Natural de Viena, el Instituto de Física de la Academia Checa de Ciencias, el Centro Alemán de Investigación de Geociencias GFZ, el Museo de Historia Natural de Oslo, la Universidad de Manchester y el Centro Aeroespacial Alemán de Berlín.
"Esta colaboración europea fue esencial para obtener el meteorito lunar, para reconocer y describir el nuevo mineral por primera vez utilizando métodos ópticos y electroópticos en el Museo de Historia Natural de Berlín, comprender su relevancia científica y determinar su estructura cristalina con alta exactitud", agrega el comunicado.