Fernando Polack reveló que un equipo de argentinos participa de una vacuna triple
El infectólogo explicó que esta posibilidad se produjo tras los desarrollos científicos que generó el Covid-19; apuntaría a atacar el coronavirus, la gripe y el virus sincitial respiratorio
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El infectólogo Fernando Polack destacó que hay varias compañías que, valiéndose de los avances que se produjeron a partir del desarrollo de la vacuna contra el Covid-19, “se lanzaron ferozmente a eliminar, sobre todo, las enfermedades de la primera edad y de los mayores de 60 años”. Al respecto, enumeró tres problemas que se podrían atacar tras estos descubrimientos: el coronavirus, la gripe y el virus sincitial respiratorio. “Se abrió la posibilidad de que haya vacunas nuevas contra los tres virus. El objetivo es eventualmente migrar a una vacuna, como si fuera la triple viral de los chicos: sarampión-paperas-rubéola, pero una triple viral de adultos”, informó.
En diálogo con el periodista Jorge Fernández Díaz en radio Mitre, Polack resaltó que, si se produce este avance, del que trabajan mil personas (entre ellos, un equipo de argentinos), se resolverían los problemas respiratorios de los adultos. Tras hacer ese anuncio, el especialista destacó que “los estudios de fase dos son muy exitosos”, y dio a conocer que la tercera fase se hará en la Argentina, de igual manera a como ocurrió con la vacuna de Pfizer.
Las vacunas contra el Covid-19, una revolución en la ciencia
Según dijo el especialista, “cada tanto hay una revolución en la ciencia”, como lo fue en su momento la carrera espacial entre Estados Unidos y la Unión Soviética para llegar a la luna, o el avance de HIV. Sobre ese último virus, señaló: “Este germen cambia de forma permanentemente y no hay manera de detenerlo. De alguna forma, lo que nos mantuvo como especie es que el Sida no tiene transmisión aérea como el coronavirus, sino por ahí hubiera sido el fin de la humanidad”.
Polack destacó los avances que se dieron en cuanto al conocimiento del sistema inmune de los seres humanos, y marcó que “el salto” en cuanto a lo que ocurrió a partir de la pandemia del coronavirus fueron las vacunas de ARN, presentes en las de Moderna y Pfizer, dado que dinamizan y aceleran mucho el proceso.
En la entrevista radial, el infectólogo tradujo la esencia de estas dosis con una metáfora en la que señaló que la mayor ventaja es que se le hace creer al cuerpo que está infectado cuando en realidad no lo está, de manera tal de que busque defenderse y genere anticuerpos. Entonces, a modo comparativo, contrastó esta agilidad y la rápida respuesta que da este avance con lo ocurrido con la vacuna del sarampión: “Fue interminable y un despelote; tenías que ir a buscar placentas a los partos y riñones a las cirugías”.
¿Cuál es el desafío de la vacuna contra la gripe?
En relación a esto, Polack se refirió a lo que ocurre con la gripe, de lo cual advirtió: “Es mucho más que ‘la gripe’, y está asociada a infartos de miocardio”. Así, resaltó que es “altísimo” el número de personas que, en el invierno, tuvieron un episodio de gripe antes de infartarse, y enfatizó entonces en la importancia de vacunarse. “La vacuna de la gripe tiene una eficacia máxima de alrededor del 60 y 70%, el año en que le acertamos bien con la vacuna”, dijo.
Tal como explicó, eso se debe a que la gripe funciona de un modo muy distinto al coronavirus, dado que “la vacuna de la gripe tiene unas deltas, unas gamas y unas alfas muy complicadas de acertar”. Y añadió: “Ahora se viene un cambió total porque, con las vacunas nuevas se apunta a conseguir cosas muy parecidas a las que se consiguen con el coronavirus”.
¿Cómo actúa el virus sincitial respiratorio?
Luego, Polack puntualizó sobre el virus sincitial respiratorio. El especialista contó que trabaja con este tercer germen desde 1999; dijo que es más importante que la gripe como causal de internación porque “no hay protección”, y explicó: “Está en personas grandes y es muy común en los bebés; de hecho, es el virus de la bronquiolitis”.
De este modo, puntualizó que “la bronquiolitis suele tener un pico cada cuatro años” y que, entonces, “cada partido político que se sube al poder anuncia que la eliminó, porque después se duerme por tres años, pero en realidad es el ciclo normal”. Y siguió: “No hay mucho que hacer contra la bronquiolitis, pero ahora están apareciendo vacunas nuevas, que pueden solucionar problemas enormes”.