Se espera una definición por el desalojo en Villa Lugano
Podría habilitarlo o frenarlo la Cámara de Apelaciones
La Cámara de Apelaciones en lo Penal porteña definiría hoy los recursos interpuestos en contra del desalojo del predio de Villa Lugano , ordenado la semana pasada por el juez subrogante Gabriel Vega y luego suspendido.
Paralelamente, el gobierno de la ciudad presentará ante la justicia en lo contencioso administrativo porteña el plan de saneamiento del terreno donde funcionó un cementerio de autos de la Policía Federal, y que desde el lunes pasado permanece tomado por unas 500 personas, pese a la contaminación existente.
La resolución del tribunal de alzada allanará o no el camino para la desocupación del lugar. De su decisión depende también que se haga efectiva o no otra orden de desalojo que emitió la jueza titular Gabriela López Iñíguez.
Como se recordará, las familias asentadas ilegalmente en el predio situado en Pola y Fernández de la Cruz, en su mayoría provenientes de la aledaña villa 20, reclaman poder acceder una vivienda social para dejar de pagar precios muy altos por condiciones indignas.
El gobierno porteño propuso a los ocupantes ser censados para una futura evaluación de su grado de vulnerabilidad, con la promesa de incluirlos como beneficiarios de la urbanización prevista para ese predio, que involucraría entre 450 y 500 viviendas. Hasta el momento, la oferta fue rechazada.
Pero, antes de construir, es necesario descontaminar la tierra. Un plan en ese sentido será presentado hoy por las autoridades ante la jueza Elena Liberatori, que supervisa el cumplimiento de la ley que obliga a sanear y urbanizar el terreno.
Por la acumulación de 6000 vehículos en desuso, fueron hallados en el lugar cadmio, cinc, cobre, cromo, manganeso, níquel, plomo, selenio e hidrocarburos en el suelo y en las napas de agua. Tal como anticipó LA NACION, el gobierno porteño estima que las tareas de remediación demandarán un año.