Ponen en duda la cifra oficial de personas sin techo y lanzan un censo popular
El gobierno porteño dice que contabilizó 1000 en abril; agrupaciones sociales, vecinales y políticas alertaron que hay entre 3000 y 5000 casos e iniciaron un relevamiento propio
Uno de cada tres argentinos es pobre. Uno de cada cinco porteños, también. Las estadísticas zanjaron la discusión sobre estas cifras. Pero, en este escenario, se abrió un nuevo debate: qué cantidad de personas viven en la calle o en riesgo inminente de llegar a esa situación en la Capital.
La duda la instalaron 50 agrupaciones sociales, políticas y vecinales que impulsaron un censo popular con el objetivo de contrastar el número oficial con los datos que reunirán más de 300 voluntarios durante una semana de recorridas por toda la ciudad. El gobierno porteño informó haber contabilizado entre 850 y 900 personas sin techo por año entre 2011 y 2016. Y al ser consultado por LA NACION sobre el cuestionamiento de las asociaciones, dijo que este año suman unas 1000. En cambio, los organizadores del relevamiento estiman que entre 3000 y 5000 personas duermen en la calle y que el número asciende a 20.000 si se suman las que están en riesgo.
El censo -que cuenta con el apoyo del Ministerio Público de la Defensa, de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad y de la Auditoría General de la Ciudad- comenzó el martes y se extenderá hasta el 16. Durante siete noches, voluntarios y referentes de cada barrio peinarán la Capital divididos en grupos y en circuitos. Sobre la base de las conclusiones, elaborarán propuestas y las pondrán a disposición del Estado.
"El censo popular surge de organizaciones formadas por gente que vive o vivió en la calle. Se hace para reflejar la realidad. Queremos entender por qué la gente está en situación de calle", explicó Christian Gruenberg, director del Programa Contra la Violencia Institucional del Ministerio de la Defensa. "El censo oficial da los mismos números desde hace años, pero hay una población que no está registrada", agregó.
El debate se da poco después de conocerse que el 18,9% de los porteños se ubicaban por debajo de la línea de pobreza al cierre de 2016, según el último informe de la Dirección General de Estadística de la ciudad; es decir, 578.000 personas sobre algo más de tres millones de habitantes. Además, de acuerdo con la Encuesta Permanente de Hogares del Indec, la pobreza alcanza al 32,2% de los argentinos.
Recorrida nocturna
Con varias cajas de alfajores y de sopas instantáneas en mano, cinco voluntarios acompañaron a Marcela -una referente trans del barrio de Constitución- en el inicio de la recorrida. "¿No iban a venir en abril? Acá los estábamos esperando hace rato", soltó Juan Carlos Bustos cuando vio al grupo. Vive en la esquina de Constitución y Lima, en una ranchada con otros cuatro hombres. "Nací en Lomas de Zamora. Hace añares que estoy en la calle. A veces voy un tiempo para allá a estar con mis hijos y vuelvo a la calle. Fue un gran obstáculo tener antecedentes penales", respondió Juan Carlos, a medida que le presentaban las preguntas del formulario.
Con los brazos acodados en el carro que usan para cartonear, Ismael González, de Perú, lo escuchaba y esperaba que llegaran las viandas de los martes. "Soy el cocinero, pero hoy nos traen comida. Hacemos guiso, casi siempre, con los huesos que nos dan en la carnicería y la verdura que nos regalan en la verdulería de la esquina", contó a LA NACION. Vive en la Argentina desde 2012 y hace dos años que está en la calle. "Vine por una mujer, pero nos peleamos y acá estoy. A mis hijos no los veo. Si mañana me dicen que me deportan, ¡ojalá, así me vuelvo a Perú!", planteó, dando a entender que no tiene dinero para pagar el pasaje.
Ambos se entusiasmaron con la propuesta. "Todos queremos saber la verdad", dijo Juan Carlos. Pero no todas las personas reaccionaron igual. "También los contabilizamos y aclaramos que no quisieron responder. Así sumamos a todos", explicó Marcela, tras recibir la negativa de un hombre. El censo se realiza durante la noche, aunque en algunos sitios los voluntarios vuelven por la mañana para registrar a las personas que estuvieron cartoneando durante la madrugada.
El martes, mientras el grupo avanzaba por las calles oscuras, se topaba con grupos de personas sentadas en sillones viejos o recostadas en colchones sucios, envueltas en mantas y rodeadas de perros. Como el caso de Salvador, oriundo de Chile, que está allí desde hace seis meses. "Sí, tengo contacto con mi familia, de vez en cuando", contó, y enseguida se puso de pie al escuchar una camioneta. Era la que utilizan los voluntarios de la Catedral de la Fe, que todos los martes reparten viandas a 250 personas que viven en la calle. "Cada vez se ve más gente sin techo. La comida se va muy rápido", sostuvo Jonatan, mientras colocaba arroz con pollo en una bandeja.
Para el gobierno de la ciudad no hay dudas sobre los números. Según el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, son 1000 las personas sin techo en la Capital, de acuerdo con un relevamiento desarrollado el mes pasado. En 47 móviles, se desplazaron 300 personas que recolectaron la información durante una noche. Participaron equipos del programa Buenos Aires Presente (BAP), de la Defensoría del Pueblo porteño y de la Asesoría General Tutelar.
"Es imposible hacer un conteo en los 48 barrios en una noche. Nos parece absolutamente ineficiente e insuficiente", reclamó Horacio Ávila, ex habitante de la calle y fundador de Proyecto 7, una organización social formada e integrada por personas que viven o vivieron en la calle. La discusión está planteada. En pocas semanas habrá nuevos números para contrastar.