Nuevos incidentes y siete detenidos en otro desalojo de manteros en Once

Continúa la pulseada entre los vendedores ambulantes del barrio de Once y las autoridades del gobierno de la ciudad. Ayer se desató un nuevo episodio de violencia , que incluyó un piquete de casi seis horas sobre la avenida Pueyrredón, siete detenidos, varios heridos y acusaciones cruzadas entre funcionarios y vendedores ilegales.

Todo comenzó a las 10.30 cuando unos 60 agentes de la Policía Metropolitana avanzaron sobre la avenida Pueyrredón, en las cuadras entre la avenida Corrientes y Sarmiento, para desalojar a los manteros instalados en las veredas y confiscar la mercadería, un operativo a cargo del Ministerio de Ambiente y Espacio Público.

"Cuando llegaron a la esquina de Sarmiento, los manteros trataron de que no les lleven la mercadería, entonces empezaron a aparecer otros vendedores de la zona para defenderlos y ahí se desató la furia. Volaron sillas, cascotes, maderas y mesas. Se tiraron con todo lo que tenían a mano. Acá nunca se había visto que se agarren así", relató Cintia Ramírez, vendedora en una zapatería sobre la esquina de Pueyrredón y Sarmiento.

El enfrentamiento duró unos pocos minutos, pero dejó un saldo de siete personas detenidas, una oficial herida que tuvo que ser atendida por el SAME y un vehículo de la Metropolitana dañado por el golpe de un cascote.

Los manteros de la zona denunciaron la violencia del ataque de la Metropolitana e inmediatamente cortaron la avenida Pueyrredón para exigir que liberen a los detenidos, entre los cuales habría dos menores de edad, una de ellas discapacitada, según su madre, y otra que, según los manteros, estaba embarazada.

"Ella me vino a defender cuando vio que la policía me estaba agarrando de los pelos, le pegaron una bofetada y se la llevaron en una camioneta. Ella es discapacitada y menor de edad ¿Cómo nos pueden tratar así?", relató a LA NACION Mirta Castillo, la madre de una de las menores detenidas.

Voceros de la Metropolitana aseguraron a su vez que cuando llegaron al lugar del operativo fueron recibidos con piedras y palos por los manteros, quienes estaban prevenidos y esperándolos.

Todos los detenidos fueron llevados a la comuna 15, donde se encuentra una de las comisarías de la Metropolitana, y las dos menores fueron derivadas por el Juzgado Correccional N° 5 al Instituto de Menores Inchausti.

"Es inaudito que nos arresten por trabajar y nos saquen la mercadería de esta manera. Si dicen que es de procedencia ilegal, que investiguen a los mayoristas de Once que nos venden todo y no nos quieren dar facturas. No somos parte de una mafia, nos atacan a nosotros porque somos los más débiles", argumentó Roberto Fernández, secretario general del Sindicato de Vendedores Ambulantes (Sivara), durante el corte de Pueyrredón, que duró casi seis horas, entre las 12 y las 5.45.

"Pedimos una mesa de diálogo con el gobierno, tenemos varios proyectos de ley para que se legalice nuestra actividad. Si no nos presentan alguna alternativa, vamos a volver a cortar la calle", agregó.

Mientras tanto, el subsecretario de Uso del Espacio Público, Patricio Di Stefano, afirmó a LA NACION que "el gobierno va a asesorar a quienes no pertenezcan a una organización y quieran trabajar dentro de la ley para que puedan hacerlo. Vamos a seguir defendiendo el comercio legal".

Hasta anoche no se había confirmado ninguna reunión, con lo que no se descarta que los manteros cumplan con la promesa de reiterar los cortes durante la mañana.

A su vez,el embajador de Perú, Marco Núñez Melgar, se reunió con la defensora del pueblo, Alicia Pierini, para manifestar su preocupación ante los supuestos episodios de violencia e irregularidades que se registraron durante los procedimientos de desalojo de trabajadores de venta ambulante en Once. Según informó la Defensoría mediante un comunicado, el cónsul señaló "la urgencia por llevar una solución a la comunidad peruana frente a la violencia", y reclamó que se investiguen los hechos ocurridos durante los sucesivos desalojos".

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