Maltrato animal: pedía $2.500.000 por cachorros de raza, pero los tenía hacinados y daba libretas sanitarias falsas
Una mujer fue detenida en Parque Chas, donde funcionaba un criadero ilegal de ejemplares de bulldog francés y pug; otras dos personas fueron imputadas por crueldad y los 22 canes, rescatados
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Una veintena de cachorros de raza, que eran comercializados en diferentes páginas web, fueron hallados de un criadero ilegal que funcionaba en una casa en el barrio porteño de Parque Chas. Hacinados en jaulas, en pésimas condiciones de cuidado y, muchos ellos, atravesando diversas enfermedades, los perros permanecían en la vivienda hasta que eran vendidos con una libreta sanitaria apócrifa.
Una de las tres personas responsables del lugar –una mujer que simulaba ser veterinaria– fue detenida por los delitos de maltrato y crueldad animal, por los que también fueron imputados otros dos individuos. Los perros, 22 en total de las razas bulldog francés y pug, tenían un valor total de venta de alrededor de 2.500.000 pesos.
Rescatados por veterinarios de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (Ufema), que ordenó el allanamiento de la vivienda, los perros fueron puestos en custodia de ONG encargadas del cuidado de animales hasta que se defina su destino definitivo.
La causa se inició a partir de la denuncia de vecinos y el fiscal Carlos Rolero Santurián ordenó la pesquisa al Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) del Ministerio Público de la Ciudad. A través de tareas de campo y en averiguaciones en la web, los investigadores lograron comprobar la existencia del criadero ilegal que vendía cachorros a través de internet.
Algunos de los ejemplares de raza, además de estar hacinados y sin los cuidados necesarios, presentaban graves problemas de salud y enfermedades como cáncer, colecta uterina y neoplasia en piel, entre otras, según diagnosticaron los médicos veterinarios que participaron en el procedimiento.
También se encontraron libretas sanitarias apócrifas, firmadas por la detenida pese a no tener título habilitante de veterinaria.
Durante el operativo, la Ufema ordenó el secuestro de las jaulas y otros documentos relativos a la comercialización de los perros, que fueron entregados para su tratamiento, recuperación y posterior puesta en adopción responsable. La Agencia de Protección Ambiental (APRA) también dispuso la clausura de la vivienda donde funcionaba el criadero por tratarse de una actividad prohibida en la ciudad de Buenos Aires.