Los cartoneros se quejan de que algunos porteros cobran por los reciclables
Les exigen alredor de 100 pesos por entregarles papel y cartón; los grandes generadores también tratan los residuos en empresas especializadas
Los recuperadores urbanos se quejan porque dicen que en algunos edificios el portero o el personal de limpieza les cobran para entregarles papel o cartón. Otros dicen que los generadores de grandes volúmenes de residuos -hoteles, empresas y restaurantes, entre otros, llamados generadores especiales- entregan el material a empresas privadas y dejan en desventaja a las cooperativas. Aseguran que la situación lleva años y que denunciar a las autoridades sería en vano. Desde el gobierno porteño afirman no tener conocimiento de esta situación.
"Te venden todo: cartón, papel blanco, metales", dice Diego Lezcano mientras recorre con su carro y su bolsón la avenida Pueyrredón. Son casi las seis de la tarde y el hombre, que está en la calle desde las nueve de la mañana, se despacha: "Antes yo compraba cartón en el shopping de Recoleta. Pero para que te dejen sacar bolsones hay que dejarles cien mangos, y a mí me conviene caminar para mí, no para pagarle a otro". Según él, puede cargar en su bolsón entre 100 y 120 kg de papel, por el que le pagan $ 1,30 el kilo. Su recaudación diaria ronda los $ 140. "Hay otros que con el chamullo de que lo llevan al Garrahan también te lo cobran; está todo arreglado", agrega.
Gastón Gandulfo pertenece a la cooperativa El amanecer de los cartoneros y reconoce haber pagado alguna vez por el papel y el cartón que luego revende: "Yo compré una vez, porque me convenía. Se lo pagaba a un precio y lo vendía más caro". Afirma que hoy no lo hace, ya que con su salario de recuperador urbano más lo que gana con la venta de lo que recolecta le alcanza.
El gobierno de la ciudad paga $ 2500 por mes a los recuperadores urbanos, que recorren tres veces por semana la ruta asignada. Los recuperadores ambientales, en cambio, trabajan de lunes a viernes en los Centros Verdes (lugar adonde va el material recolectado) y cobran $ 4850 por mes.
Tanto Gandulfo como los demás recuperadores saben en dónde pueden hacer su trabajo libremente y en qué lugares deben pagar por ello. "Aquí a una cuadra hay una imprenta que tiene un canasto lleno de papel blanco que es para descarte. Eso lo venden a $ 100. Ese papel es el mejor; a mí me lo pagan a $ 1,80 el kilo", asegura Leonardo Leguizamón, que recorre el microcentro.
Los cartoneros consultados coinciden en que la situación es muy común entre los porteros de edificios, encargados de limpieza, bancos, algunos supermercados de las grandes cadenas y los chinos, quienes usualmente cobran por sacar los materiales reciclables.
"Cuando hay muchos kilos quieren sacar provecho. Lo hacen callados, ya saben a cuánto está", agrega Leguizamón. Teresa Barrientos asegura que en la mayoría de los casos son los encargados de edificios los que quieren hacer su propio negocio con los residuos. "Si te van a sacar papel o cartón, te piden una moneda. Ésos están a nuestro nivel, se arreglan con lo que les damos." Cuenta que, incluso, un portero dejó de entregarle el material porque ella se negó a pagarle.
Problema vigente
"Ésta es una problemática que ya denuncié en 2005, y todavía sigue", dice Sergio Alejandro Sánchez, presidente de la Federación de Cartoneros y Recicladores de Argentina y coordinador del Centro Verde de Barracas. Sánchez asegura que están en tratativas con los encargados de edificios para cambiar esta situación. "Ya tuvimos una reunión con la gente del Suterh (Sindicato Único de Trabajadores de Edificios y Renta Horizontal). Ellos reconocen que esto existe, por eso estamos tratando de llegar a un acuerdo." Según él, el encuentro fue el primer paso para cambiar una realidad que afecta a muchos cartoneros e implica el compromiso de éstos de capacitar a los encargados sobre cómo hacer la separación en origen. "La idea es poder trabajar juntos", explica.
Desde el gobierno porteño dicen que no tienen conocimiento sobre la existencia de estas situaciones. "Todos los encargados que trabajan en la ciudad de Buenos Aires cobran un plus por separar en origen y combinar el retiro de los reciclables con la cooperativa, por lo que esto no debería ocurrir", apunta Carolina Lascano, gerente de Relaciones Institucionales del Ministerio de Ambiente y Espacio Público.
"El gobierno de la ciudad no promueve la venta de reciclados bajo ningún aspecto", agrega. Respecto de los generadores especiales, la funcionaria afirma que la ley de basura cero habla de "otorgarles prioridad" a las cooperativas, pero no la exclusividad. "El generador especial puede elegir vender su material reciclable a una empresa apta para ello. No tiene obligación de dárselo a la cooperativa", concluye.
Lascano dice además que constantemente se realizan controles para evitar cualquier situación anómala. "El área de Fiscalización inspecciona a los distintos generadores. Hay un cuerpo de 200 inspectores que verifican que el generador especial cumpla con todas las normas."