La Plata: se entregó el informe de la inundación
Se podrían haber atemperado las fatales consecuencias
LA PLATA.- Un equipo de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata entregó a la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación un pormenorizado informe técnico y diagnóstico sobre la trágica tormenta del 2 de abril pasado y sus consecuencias en la capital bonaerense.
Pablo Romanazzi, titular del Laboratorio de Hidrología de esa facultad y uno de los autores del estudio, dijo al respecto que si se hubieran llevado adelante las obras recomendadas por su cátedra en 2007, "en la reciente inundación el agua habría empezado a retirarse unas cinco o seis horas antes".
"Ese lapso de tiempo, ante una situación tan grave como la que vivimos, resulta fundamental", dijo Romanazzi, que recordó que "hubo mucha gente bajo estado de hipotermia que pasó toda la noche esperando una ayuda que no llegó y, lamentablemente, falleció o contrajo serios problemas de salud".
El ingeniero aclaró que no se puede afirmar que la cifra de muertos podría haber sido menor, pero que "en muchas calles el agua se mantuvo a niveles muy elevados hasta las 8 de la mañana del día siguiente", por lo que "quizá, de haberse hecho las obras, el agua se habría retirado a las 2, lo que hubiera contribuido a las tareas de rescate y ayuda".
El ingeniero Romanazzi, que participó ayer de un seminario en la Facultad de Arquitectura sobre "Gestión del riesgo hídrico para el desarrollo del medio urbano y regional", sostuvo que los elevados niveles de lluvia generan que "la infiltración de los suelos pase a un segundo plano".
Para el especialista "la urbanización tiene que ser responsable, y por lo tanto, se deben respetar las vías preferenciales que tiene el agua a su paso, ya que no podemos seguir urbanizando hasta el mismo cauce del arroyo".
"Las ciudades crecen de manera caótica, muchas veces por las necesidades de las personas en un país en vías de desarrollo como el nuestro. La gente necesita asentarse en algún lado y lo hace donde puede", aseguró.
Para Romanazzi, "las técnicas han avanzado tanto que hoy no es un imposible plantear una planificación acorde a lo que estamos viviendo", y que el hecho de que tres fuertes tormentas hayan tenido como escenario a la ciudad de La Plata en la última década (2002, 2008 y 2013) "requiere que el tema sea tratado con otra entidad, lo que significa mayor responsabilidad".
Por último, reiteró que "es necesario que haya una organización que siga y registre estas cuestiones y eduque a la población, porque no hay soluciones inmediatas, ni tampoco las obras nos garantizarían una protección completa y definitiva", aunque tal vez, "con una buena organización y correctas medidas de prevención se puedan evitar nuevas tragedias".