Entre el desastre y la negligencia humana
Un estudio de la UNLP destaca la falta de alerta meteorológica y las acciones insuficientes
Según un estudio que elaboró el Departamento de Hidráulica de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de La Plata (UNLP), la amenaza natural tuvo consecuencias dramáticas el 2 y el 3 de abril de 2013 por la negligencia humana.
Resultaron inundadas 3500 hectáreas, murieron al menos 89 personas y fueron damnificadas unas 190.000 cuyas pertenencias y recuerdos personales quedaron sumergidos bajo el agua.
Ese día "no fue emitida una alerta meteorológica por tormentas severas" y "las acciones desplegadas a nivel local en pos de la mitigación fueron tardías, caóticas e insuficientes", señaló el informe. Pablo Bruera, el entonces intendente de La Plata, se encontraba en Brasil.
La inundación se explicó porque las redes de desagües pluviales no estaban en condiciones de conducir los excedentes generados por las tormentas. Sobre todo las aguas de los arroyos Pérez y Regimiento, que, cuando hay lluvias, se escurren por la superficie a través de las calles del entramado urbano.
Las horas de mayor inundación en el interior de las viviendas fueron entre las 19 del 2 de abril y las 2 del día siguiente. El agua permaneció entre 7 y 17 horas, de acuerdo con la zona: las más afectadas fueron Tolosa, Ringuelet, Plaza Belgrano, San Carlos y La Loma. La corriente evolucionó de Sur a Norte.
El estudio de la UNLP advirtió que si bien las lluvias del 2 de abril de 2013 tuvieron una magnitud sin precedente, no existía un sistema de alerta específico para la ciudad. Además, "las obras hidráulicas no crecieron en la misma medida que los crecimientos urbanos".
Chequeado accedió al anexo de este estudio, que fue poco difundido, pero que era clave para comprender la importancia de las obras hidráulicas. Allí se explica que el viejo plan de infraestructura de 2010 hubiera permitido disminuir considerablemente el tiempo de permanencia del agua.
Nunca se hizo y hubiera salvado vidas, aunque el por entonces gobernador bonaerense Daniel Scioli le endilgó toda la culpa de lo ocurrido al "diluvio sin precedente".