Macri quiere crear impuestos para financiar el subte
La iniciativa para hacerse cargo del servicio debe ser aprobada por la Legislatura
Faltan 38 días para el 1° de enero. Contra reloj, el Ejecutivo porteño le daba anoche las últimas puntadas al proyecto de ley que enviará el martes a la Legislatura para hacerse cargo del subte apenas comience 2013. Financiamiento, control y seguridad son los grandes ejes del texto que anoche iba de mano en mano entre los principales referentes del gobierno de la ciudad.
Ya sin subsidio nacional para financiar el gasto operativo de la red, estimado en 1054 millones de pesos anuales, el gobierno de Mauricio Macri propone crear en 2013 un fondo a partir del aumento del 10% en las tarifas de los peajes de las autopistas porteñas y de un 5% del impuesto a la patente de los autos de alta gama, más la creación de un impuesto al combustible, de entre 15 y 40 centavos por litro. Todas malas noticias para los bolsillos de los automovilistas porteños.
El proyecto deberá ser aprobado por la Legislatura , donde el oficialismo no tiene mayoría, por lo que requiere el apoyo de otras fuerzas políticas para conseguir los 31 votos necesarios.
Este no es un tema menor para su gestión: después de un año de reclamos y reproches, hace diez días Macri decidió hacer efectivo el traspaso. "Hemos llegado a la conclusión con mi equipo de que si no nos hacemos cargo del subte, aunque sea en estas condiciones, lo que vendrá a futuro va a ser peor", aseguró el jefe de gobierno cuando anunció que la Ciudad tomaría en sus manos el servicio, después de criticar duramente la política nacional en materia de transporte público .
"A partir de los resultados del informe decidimos acelerar el proceso", confió a LA NACION Martín Ocampo, el diputado de Pro, encargado de redactar el proyecto. Hacía referencia a la auditoría que hizo Transports Metropolitans de Barcelona para Subterráneos de Buenos Aires (Sbase), con durísimas apreciaciones sobre la seguridad en el subte.
El control del subte es uno de los grandes ejes del proyecto. Dentro de las medidas previstas se encuentra la declaración de emergencia del servicio, con la idea de que el Ejecutivo pueda disponer de medidas de excepción.
Aunque no se descarta una posible estatización de la red o la firma con un nuevo concesionario, como hasta ahora es Metrovías, el jefe de gabinete Horacio Rodríguez Larreta adelantó que durante un plazo de 90 días esa empresa seguirá a cargo del servicio. "No hay tiempo de redactar un contrato desde cero. Bajo la supervisión y la dirección de Sbase, Metrovías estará a cargo mientras se decida qué hacemos", señaló Rodríguez Larreta que subrayó: "No hay una transferencia de contrato para Metrovías".
Ocampo señaló que durante este período de emergencia, los ingresos colaterales de la red no irán a la concesión sino a un fondo especial que creará la futura ley. Se refería a los ingresos por publicidad, por el tendido de fibra óptica o por la locación de los locales en las estaciones, entre otros. A este nuevo fondo, que administrará un fideicomiso, también irán los recursos de naturaleza tributaria que nacerán con el traspaso. "Esta modalidad de fideicomiso hace que no nos metamos en el presupuesto de la ciudad, lo que genera seguridad jurídica al sistema y va mucho más allá de esta gestión", opinó Ocampo.
En sintonía con la filosofía del gobierno porteño de desalentar el uso del automóvil, se ubican esta suba en los peajes y este nuevo impuesto a la nafta en la ciudad, similar a una medida que tomó José de la Sota en Córdoba. Será de $ 0,40 para la nafta premium, $ 0,30 para el resto de las naftas, $ 0,20 para el gasoil y $ 0,15 para el GNC. Algo similar pasa con el aumento de la patente para los autos de más de 150.000 pesos.
Estos nuevos gravámenes, o la suba de impuestos existentes para alimentar este fondo, son las soluciones que el gobierno porteño encara para no aumentar -al menos en un primer momento- la tarifa del subte, que subió un 127% en enero pasado, cuando el macrismo y el Gobierno nacional firmaron el acta que daba inicio al traspaso.
Lejos del olvido, queda clara la intención del gobierno porteño de reclamar a la Nación los recursos para el servicio. Rodríguez Larreta confió que pedirán voluntariamente o "por vía judicial" al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner cerca de 1200 millones de dólares de gastos invertidos y 500 millones de gastos operativos. Ya hay abogados trabajando en la demanda, que llegará a la Casa Rosada apenas se apruebe la ley del traspaso.
Según adelantó Larreta, el cobro de las tasas destinadas al sostenimiento del servicio, dejarán de ser cobradas cuando la Nación pague los fondos que el gobierno porteño reclama. Será Sbase junto con el Ente Regulador de los Servicios Públicos los encargados de fijar estándares de calidad y control para la red. "En el actual marco regulatorio no existen. Queremos dejar atrás los actuales parámetros de Estado ausente para tener un estado hiperpresente en el manejo del servicio de subtes", destacó Ocampo. Un preciso sistema de normas, con sanciones claras para quienes viajen sin boleto o para quienes cometan actos de vandalismo, son algunos ejemplos.
Aunque el sostén económico es el gran desvelo, la seguridad del servicio es una preocupación esencial. De los pasajeros, queda claro, pero también de los funcionarios macristas. "Es responsabilidad de la Policía Federal -dijo Ocampo-. Vamos a diseñar un plan de seguridad con policías de la ciudad pero eso podría llevar más de un año." Con esta ley, el subte será declarado servicio público esencial, lo que significa que no puede dejar de ser prestado.
El proyecto del Pro necesita del aval de otros bloques para convertirse en ley. Aunque no tienen la certeza de que eso vaya a ocurrir, los hombres de Macri son optimistas.
Los fondos
- $ 0,15 y $ 0,40
Habrá un recargo por cada litro de combustible
- 10%
Proponen aumentar el peaje en las autopistas porteñas
- 5%
Buscan subir las patentes de los autos de más de $150.000
lanacionarDel editor: cómo sigue.