La Costanera Norte de la ciudad cambiará de forma definitiva con la llegada de nuevos emprendimientos; cuándo estarán listos
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El cierre tormentoso de Los Platitos de Costanera Norte, donde por 44 años se sirvieron miles de sándwiches de cuadril, la especialidad de la casa, marcó el punto final de una época y el comienzo de una nueva era para la zona. Se trata de un proyecto integral que la Ciudad comenzó a masticar hace más de cinco años, con la concepción de la ley que daba impulso al Distrito Joven.
Se trata de un polígono comprendido por las tierras existentes (o a ganarse) entre la Av. Costanera Rafael Obligado y el Río de la Plata. Son 15 hectáreas que se extienden desde el Parque de la Memoria hasta Costa Salguero.
El final de la concesión del tradicional espacio, una parada obligada de taxistas y porteños, le abrió las puertas a una transformación comercial y gastronómica que acompañará lo que ya está ocurriendo sobre las costas del Río de la Plata, con nuevas instalaciones y propuestas que provocarán un cambio definitivo.
Al menos ocho obras se están ejecutando entre Ciudad Universitaria y Tierra Santa, antes de llegar al aeroparque metropolitano. El objetivo es que estén listas antes de fin de año, para recibir a los clientes entre noviembre y diciembre. Son bares, restaurantes y boliches. “La obra empezó en enero y vamos bien, cumpliendo con los tiempos. En diciembre deberíamos tener listos los dos lugares. Acá van a poner un nuevo bar y restaurante; en este otro, un boliche que ya funciona, lo trasladan acá”, explica el capataz de la obra, bajo una estructura de perfiles de hierro que soportarán el techo.
Una de las obras suma 1100 metros cuadrados en dos plantas que se dividirán en boliche, arriba, y restaurante, abajo, con fecha de finalización estimada en noviembre próximo. Al lado de esas dos construcciones, y a metros de los carritos de la costanera que fueron mejorados hace un tiempo, el relleno con materiales áridos de las obras avanza sobre el río.
Los restos de Siga la Vaca, quedarán sepultados a medida que avance la demolición para darle espacio a un nuevo local gastronómico; como ocurre al lado del tradicional Happening o frente al Parque de la Memoria, con un techo triangular que apunta como una flecha negra y gigante hacia el Río de la Plata.
“[El proyecto] Contempla una renovación integral de la Costanera Norte, con amplios espacios verdes de uso público y una variada oferta gastronómica, cultural y recreativa que se integra armónicamente al paisaje urbano y que considera diferentes aspectos ambientales de sustentabilidad, tales como terrazas verdes absorbentes”, explican desde el Ministerio de Desarrollo Económico de la ciudad.
Dividido en sectores gastronómicos, recreativos, culturales, de esparcimiento y parque público los espacios fueron concesionados a inversionistas privados por un plazo inicial de 10 años con un plazo de 24 meses para terminar el desarrollo propuesto. Al finalizar el período concesionado, los inmuebles vuelven a ser posesión del Gobierno de la Ciudad, siempre y cuando durante ese tiempo no haya cambios en la legislación. Los proyectos están apoyados por el Banco Ciudad, la Agencia de Protección Ambiental y la Dirección General de Interpretación Urbanística.
Los nuevos protagonistas
La Nube, por ejemplo, tiene la adjudicación de uno de los sectores y allí las obras comenzaron en enero, con un plazo de finalización en septiembre próximo para construir un emprendimiento gastronómico. En el lugar que ocupaba Los Platitos, la empresa Madero Eventos está construyendo un espacio para eventos con la idea de tenerlo listo en octubre.
Drinkalot S.A. debería culminar en agosto su proyecto gastronómico y de esparcimiento. También El Pibe Dorrego S.A., en el espacio ex Bahamas, desarrolla un emprendimiento gastronómico y espera terminarlo en octubre. Emprendimientos Río S.A., Concasse del Pilar SA, Blue Night SRL y Distrito Costanera tendrán sus espacios de gastronomía, esparcimiento y eventos listos antes de fin de año, de acuerdo al plan de obra.
Otros cuatro espacios van tomando forma cerca del Parque Extremo y del nuevo parque del Arroyo del Vega. El ex Rodizio fue concesionado a El Poleso SRL para desarrollar un espacio de usos gastronómico, recreativo y discoteca; el tradicional Gardiner tiene sus proyectos cercanos al restaurante que hoy tiene en funcionamiento; también se sumarán los locales bailables Tequila y Banana.
Otros hitos
Distrito Joven es una más de las intervenciones de la Costanera Norte que es parte del plan BA Costa, lanzado por el Gobierno de la Ciudad hace algunos años con propuestas de diferentes alcances. Una de las últimas atracciones presentadas fue el parque del Arroyo del Vega, ubicado detrás del Parque Extremo que ya funcionaba con una pista de skate, senderos y espacio verde cercano al río.
Pegado al club náutico Puerto Norte y enlazado con otros espacios verde el nuevo espacio se encuentra donde se había instalado el obrador del aliviador del arroyo Vega durante la construcción del gran túnel que conecta a Parque Chas con la Costanera. Después del emisario del arroyo Maldonado, el túnel de 8,3 kilómetros fue proyectado para reducir el impacto de las lluvias y las sudestadas que generaban anegamientos en los barrios de Villa Ortúzar, Agronomía, Parque Chas, Colegiales y, principalmente, Belgrano. El entorno de la superficie se convirtió en cinco nuevas hectáreas de esparcimiento, senderos y vegetación.
“Está bien piola que se haya expandido. Hace varios años vengo acá, vivo en Villa Crespo, pero me arrimo siempre que puedo a probar la pista, los saltos. Me parece súper bien que hayan quitado las rejas que estaban en la vereda, queda mucho mejor asó de abierto”, dice Federico Montes, mientras disfruta del solcito de invierno, a pesar de la baja temperatura.
Cerca suyo está Sebastián Mesa, de remera blanca y bermudas grises, con cascos y protectores en rodillas y codos. Mira hacia el río, espera un tiempo hasta lanzar la próxima maniobra, toma impulso y se zambulle en la olla. “Es una desconexión fantástica, el lugar es buenísimo y la ampliación del parque quedó tremenda. Toda la zona va quedando muy bien, se ve que le están metiendo mano a toda la costanera”, suelta.
Todo el frente costero se encuentra en constante evolución desde que fue instalado el monumento a Cristóbal Colón en el espigón Puerto Argentino, que luego de la colocación de la escultura se abrió como un paseo peatonal integrado al resto de la Costanera. En esa zona, frente al aeropuerto, los nuevos espacios conviven con las obras de ampliación de la terminal aérea, que incluye la expansión de la avenida Rafael Obligado, un estacionamiento subterráneo en tierras ganadas al río y, más al extremo norte, la eliminación del estacionamiento descubierto que se convertirán en nuevos puestos para aviones.
Distrito Joven también se enlaza con los cambios previstos en Costa Salguero y Punta Carrasco donde a medida que se van venciendo las licitaciones de los privados se va recuperando espacio para generar nuevas atracciones abiertas al público. Como ocurrió recientemente con el club de golf que cerró sus puertas en octubre del año pasado para convertirse en un parque verde o el cierre de concesionaria de vehículos, una estación de servicio, un espacio de alquiler de canchas de fútbol, un gimnasio y espacios de diferentes rubros.
La plaza memorial AMIA, más cerca del extremo norte, es otro de los puntos fuertes del cambio sobre la costanera. Ese sitio, creado sobre los escombros del edificio que fue atacado, servirá como homenaje permanente de las 85 víctimas y las más de 300 personas heridas en el atentado y se conectará con la reserva ecológica de Ciudad Universitaria. La playa permanente, las mejoras en el Parque de la Memoria y otras intervenciones también son parte del cambio de imagen de la Costanera Norte.