El Metrobus Norte ahora une Pacífico con Vicente López

El Metrobus Norte, que circula por la avenida Cabildo, ayer sumó otros 2,8 kilómetros a su recorrido: el nuevo tramo, que se extiende desde la avenida Congreso, en Belgrano, hasta la calle Benjamín Matienzo, en Palermo, es transitado por 16 líneas de colectivos. De modo que ahora es posible viajar desde Olivos, en Vicente López, hasta Pacífico.

El gobierno porteño estima que el tiempo de viaje se reducirá en un 35% para las 250.000 personas que usan esas líneas cada día.

Además, también quedó habilitado el Centro de Trasbordo Pacífico, que con una extensión de 1,1 kilómetro funciona entre las calles Carranza y Thames como un centro de distribución: allí convergen 22 líneas de colectivos, la Línea D del subte y la estación Pacífico de la línea del tren San Martín. Por día circulan unas 120.000 personas.

Según comprobó LA NACION en una recorrida por todo el trayecto nuevo, los pasajeros que tomaron el Metrobus Norte celebraron que se redujera el tiempo de viaje y se mejoraran las condiciones de seguridad. Pero también hubo reclamos: según dicen, aumentó la distancia entre las paradas de las líneas y ahora hay que caminar más.

Los comerciantes ubicados sobre las avenidas Cabildo y Santa Fe también expresaron reparos: temen por la caída de sus ventas.

"Me subí al 67 en la avenida Balbín. Antes tardaba 20 minutos hasta Benjamín Matienzo. Hoy tardé 10", se alegró Osvaldo García, de 63 años, comerciante.

En igual sentido se expresó Luisa Foerster, de 85 años: "En el 152, desde Puente Saavedra hasta la calle Matienzo antes tardaba 30 mintutos. Hoy tardé unos 20", calculó. Agregó que la circulación sólo se traba a la altura de Juramento, donde el tráfico es muy intenso.

Pero muchos pasajeros consideraron que la disminución en el tiempo de viaje no se debe sólo a la circulación de los colectivos por los carriles exclusivos. "También se debe a que eliminaron muchas paradas", observó Silvia Gluck, de 73 años, jubilada. Al Metrobus Norte le vio virtudes y defectos. "A favor: hay protección contra la lluvia y el acceso para los discapacitados es muy bueno. A mí antes me costaba mucho subir al 152, y ahora ya no. En contra: hay demasiada distancia entre las paradas", distinguió.

En las plataformas para tomar el Metrobus se registraron algunas escenas de confusión entre los pasajeros, que aún deben aprender la nueva ubicación de las paradas.

"Más que un Metrobus, estamos inaugurando horas libres para muchísima gente", dijoHoracio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno porteño, durante la apertura de la nueva sección del Metrobus Norte y el Centro de Trasbordo Pacífico. Las obras se iniciaron en abril y, tal como estaba previsto, se habilitaron en siete meses.

"Aún hay algunas dudas de pasajeros y de choferes acerca de dónde están ubicadas las paradas", explicó un jefe de tráfico de la Línea 12, en Santa Fe al 4500. Agregó que aunque los choferes hicieron un curso sobre cómo circular por el nuevo sistema de carriles, aún se cometen errores. "¿Ves? -dijo señalando a una unidad de la línea 64-. Este viene mal, porque no bien la unidad recoge a los pasajeros debe correrse al carril de la izquierda".

Además, sostuvo que, como la distancia entre las paradas es mayor y los colectivos toman la onda verde, muchos circulan a altas velocidades: "¡Que los peatones crucen sólo por las esquinas!", advirtió con severidad.

En efecto, el cambio de ubicación de las paradas provocó confusión en muchos pasajeros. Florencia Perrotta, estudiante de 23 años, contó que esperó la línea 15 durante 10 minutos en la cuadra equivocada.

Mientras muchos pasajeros celebraron el tiempo que ganarán por el acortamiento de los viajes, los comerciantes con locales ubicados sobre las avenidas Cabildo y Santa Fe mostraron preocupación.

"Nos vimos muy desfavorecidos", se lamentó Alejandra Tournier, de 48 años, dueña de un negocio de venta de accesorios para celulares en Santa Fe al 4500. "Antes, cuando teníamos a las paradas ubicadas enfrente al local, la gente tenía el paso forzado por acá, y cuando hacía la cola espiaba la vidriera", agregó.

Pero ahora es mucho menor la cantidad de personas que circula frente a los comercios. Al contrario, se registran grandes concentraciones de gente en las esquinas, desde las cuales se accede a las plataformas para tomar el Metrobus.

Los automovilistas coinciden en que los grandes beneficiados con el Metrobus son los pasajeros de colectivos, aunque destacan que el sistema ordena el tráfico.