Con ciclos en el complejo 25 de Mayo, vuelve el cine a Villa Urquiza
El histórico establecimiento reabrió en 2008, pero le faltaba recuperar la proyección de películas; en el barrio tampoco hay salas comerciales desde fines de 2002
Vuelve el cine a Villa Urquiza . Finalmente, los vecinos, esos mismos que llevaron adelante una fuerte cruzada para que el Cine Teatro 25 de Mayo se mantuviera en pie, podrán revivir una vieja costumbre a pasos de sus hogares. El próximo 10 de marzo se proyectará la primera película de un ciclo desde que el nonagenario inmueble, conocido en sus épocas de esplendor como el Petit Colón por sus características edilicias, fuera recuperado.
Por tratarse de la gala especial de la reapertura del cine, ese domingo el film se proyectará de forma gratuita y para toda la comunidad en las puertas del ahora Centro Cultural 25 de Mayo, como fue rebautizado. Se cortará la avenida Triunvirato al 4400 y a las 19 comenzará la función. Todavía no se sabe qué película se verá: esa decisión está sometida a la votación de la gente mediante los distintos canales de la ciudad y hasta mañana. Las opciones son Camila, de María Luisa Bemberg; Yo soy así, Tita de Buenos Aires, de María Teresa Constantini, y Recreo, de Jazmín Stuart y Hernán Guerschuny. En el contexto del Mes de la Mujer, la terna está conformada a propósito por films nacionales que fueron dirigidos por argentinas.
Pero no solo será un hito en la historia del 25 de Mayo, sino en la del barrio. En Villa Urquiza no funcionan salas de cine desde el 29 de diciembre de 2002, fecha de la última función del Gran Urquiza (originariamente Edén Palace). A la par de él, en distintos momentos del siglo pasado, funcionaron también el Cine Teatro 9 de Julio, el Cine Teatro Supremo y el Cine Gran Bourg.
"Siempre íbamos a ?El 25'. Era la salida para nosotros", recuerda a LA NACION, con un dejo de nostalgia, Alejandra Ferrari. Toda su vida transcurrió en los alrededores del barrio y eso incluyó a aquella sala que se estrenó el 23 de mayo de 1929. Fueron los mismos vecinos y comerciantes de la zona los que mandaron a edificar el espacio. En ese entonces, el 25 de Mayo era teatro y cine; era la excusa perfecta para que mujeres y hombres tuvieran, entre otras cosas, su primera cita. Decenas de proyecciones y funciones pasaron por allí hasta que, en la década del 80, el lugar cerró.
El abandono no tardó en llegar. Incluso, el predio fue intrusado. Y entonces, como ocurrió en otros barrios porteños con una arraigada identidad cultural con sus salas, los vecinos empezaron a movilizarse y juntaron firmas para que no terminara su vida como una playa de estacionamiento o un supermercado.
En 2004, durante el gobierno de Aníbal Ibarra , la Ciudad compró el predio y la obra para la recuperación del inmueble se extendió varios años. Fue en 2008 cuando el Cine Teatro 25 de Mayo, ya reconocido como patrimonio histórico, volvió a abrir sus glamorosas puertas. Sin embargo, había algo que faltaba. No se proyectaba cine, a excepción de la participación en el BAFICI: el complejo fue una de las sedes más importantes de ese festival hasta 2012 y llegó a presentar más de 200 películas con mayoría de entradas agotadas.
"Hubo algunas películas al principio, pero no hubo continuidad en el ciclo. Recién ahora podemos decir que el cine vuelve de Villa Urquiza para el mundo", enfatiza en diálogo con LA NACION Mónina Bonelli, directora artística del lugar que, desde 2016, lleva el nombre de Centro Cultural 25 de Mayo "porque ya no está pensado como un lugar para la mera exhibición de películas u obras, sino como un espacio cultural en el que la gente y especialmente los vecinos pueden participar de talleres y muestras de distintas disciplinas artísticas".
Aniversario y regreso
Este año se cumplen 90 desde que el edificio se inauguró y, por ello, la primera programación cinematográfica fue pensada para recorrer el tiempo. Con el ciclo "El Noventón", cada mes entre marzo y diciembre estará dedicado a una década del cine. En marzo, por ejemplo, podrán verse cuatro películas clásicas de entre 1929 y 1939, y seguirán otras décadas. Las funciones se organizaron para los miércoles, a las 19. Un curador invitado será el encargado de presentar el film y luego de la proyección, se abrirá un espacio para el debate.
En otro ciclo, también se podrán ver películas temáticas cada mes. Hay 500 butacas disponibles y anticipan que los precios de las entradas serán populares. "Yo voto por la película de Tita", dice entusiasmado Gustavo Mendoza, cinéfilo de sangre -como se describe- y vecino de Villa Urquiza. Ve con buenos ojos el retorno del cine a la sala principal.
Desde la Ciudad, indicaron que se espera atraer a nuevas audiencias, aquellas que buscan un espacio en el que descubrir películas que no encuentran fácilmente o que, por no ser actuales, no pudieron disfrutar en la pantalla grande al momento de su estreno. La idea es ofrecer un lugar donde volver a ver los clásicos, compartir películas épicas y adentrarse en la filmografía de grandes cineastas. "El 25", como repiten los fanáticos, no formará por ahora parte del circuito comercial del cine.
Para concretar la propuesta, el Ministerio de Cultura porteño, de quien depende el establecimiento, adquirió un nuevo proyector láser de 15.000 lumens full HD para las proyecciones digitales. También se acondicionó el antiguo proyector de 35mm y se mejoró el sistema de audio con equipamiento Dolby Digital, para lograr un sonido envolvente 5.1. Para la terraza del ahora complejo se adquirió un proyector, pantalla y sonido acordes para la experiencia de proyectar al aire libre películas mudas, ya en marcha este verano. "Queremos que el cine esté presente en la vida de los porteños para seguir haciendo de la cultura un lugar de encuentro y unión", dijo el ministro de Cultura, Enrique Avogadro.
La historia del lugar
1929
Inauguración
- El 25 de Mayo se inauguró el 23 de mayo de 1929. Por entonces, combinaba funciones de teatro y de cine.
1982
Cierre
- El cine teatro cerró sus puertas ese año. Sucumbió al abandono y el predio fue intrusado. Los vecinos empezaron a movilizarse para su recuperación.
2004
Compra
- En 2004, la Ciudad compró el predio. La lucha de los vecinos vio su primer resultado. La obra de remodelación del inmueble se extendió varios años.
2008
Reapertura
- Ese año volvió a abrir las puertas el histórico establecimiento, ya reconocido como patrimonio histórico. Pero su programación no incluyó cine.
2019
Llega el cine
- A partir del 10 de marzo, empezarán ciclos de cine que incluirán películas clásicas y de autor.