Agua con mal olor. ¿Cuáles son los barrios más afectados?
Desde el 4 de septiembre, muchos porteños, como también algunos vecinos de la zona norte de la provincia de Buenos Aires, notan que el agua que provee Agua y Saneamientos Argentinos (AySA) tiene gusto y olor a aceituna. Si bien desde la empresa que dirige Malena Galmarini señalaron que el agua es potable y apta para el consumo, las quejas en las redes sociales y en el centro de atención al cliente se siguen acumulando.
Desde la empresa señalaron a LA NACION que, durante la última semana, la gran mayoría de las quejas fueron de vecinos de San Isidro, Palermo, Belgrano y Caballito, aunque no precisaron el número de reclamos que hicieron los usuarios.
Según explicaron en AySA, desde la Planta San Martín, situada en la avenida Figueroa Alcorta al 8500, en Palermo, se detectaron variaciones en el Río de La Plata, y esos cambios en el agua son los que modificaron el olor y el sabor. Los barrios que se nutren del agua de dicha planta (cerca de 6 millones de personas) son los más afectados.
Los distritos que reciben agua de la planta San Martín son San Isidro, Vicente López, San Martín, Tres de Febrero, Morón, Ituzaingó, Hurlingham y una parte de La Matanza, en el conurbano bonaerense. En la ciudad, este fenómeno tiene más intensidad desde la Avenida Rivadavia hacia el norte, porque en el sur del distrito el agua se empieza a mezclar con la producida en la Planta Belgrano, en Bernal.
Desde AySA aseguran que el numero de quejas está en baja, y que ayer no se registró olor en el ingreso de agua de la planta San Martín.
El tema agua ya es insoportable. Con el agua caliente ese olor a aceitunas rancias se nota más. Me acabo de bañar asqueada, @AySA_Oficial&— [R]Florencia[R] (@fetcheves) September 14, 2020
La empresa estatal solicitó la intervención de la Unidad Fiscal de Medio Ambiente para que investigue los motivos por los cuales se modificó el agua, a fin de determinar si existe o ha existido alguna conducta delictiva, como un caso de contaminación producido por alguna empresa que vertió efluentes industriales al río.
En su presentación ante la Justicia, AySA expresó que tomó acciones inmediatas que se continúan desarrollando a efectos de impedir que esta situación incida en la normal prestación del servicio, tales como recorridas de planta para detección de olores en distintos sectores, toma de muestras de agua cruda, filtrada y de salida para analizar en el laboratorio central, seguimiento de parámetros, como la turbiedad y altura del río, entre otras.
En cuanto a su origen, si bien explicaron que aún no se pudo determinar, teniendo en cuenta los muestreos realizados por el barco laboratorio y también en tierra en los distintos arroyos, podría inferirse que el problema vendría del Río Reconquista, luego pasó al Río Luján y, finalmente, llegó a la planta en el Río de la Plata.
"Desde el lunes no estamos percibiendo el olor en el agua cruda y tampoco en la salida, pero no podemos decir que esto terminó, porque está asociado al bajo nivel del Río Paraná. Hay niveles muy bajos en el Río Paraná, que está en mínimos históricos; nuestros modelos matemáticos nos indican que cuando eso sucede hay mayor influencia de la contaminación de la costa de Buenos Aires, más el aporte de los ríos Luján y Reconquista", dijo Danilo Zanata, director de Plantas y Establecimientos de AySA.
El especialista agregó que, si bien el agua es potable y no hay ningún riesgo para la salud, aún no tienen identificada la sustancia en el agua que genera el mal olor y sabor."Para eso hicimos la denuncia, así la Justicia investiga qué es lo que sucede".