Avanza la investigación por el apagón de Recoleta y hay indicios de una mala praxis
Según el gobierno porteño, la excavación se hizo a una profundidad no autorizada
Mientras un fiscal federal decidió ayer impulsar la denuncia del Gobierno nacional contra las empresas Ibercom Multicom y Telmex SA y contra funcionarios porteños por el apagón en Recoleta y Barrio Norte, surgieron indicios de que existió una mala praxis de la contratista en la excavación que culminó con dos líneas de alta tensión dañadas y 90.000 usuarios sin luz.
Según el subsecretario de Mantenimiento del Espacio Público porteño, Rodrigo Silvosa, se había autorizado a Ibercom Multicom a perforar a 80 centímetros de profundidad para realizar un tendido de fibra óptica en la zona de Figueroa Alcorta y Carlos Vaz Ferreira.
"Pero los ductos de Edesur que fueron afectados por la tuneladora corren entre 1,60 y 2 metros de profundidad. Si bien nuestros inspectores no pudieron acceder al lugar para constatar las instalaciones, todo indica que se intentó excavar muy por debajo de lo autorizado", explicó el funcionario a LA NACION.
En tanto, fuentes de la distribuidora Edesur denunciaron que la contratista de Telmex SA -que se mantiene en silencio desde el inicio del incidente- no cumplió con la reglamentación vigente para trabajar en el subsuelo.
"Una vez que se obtiene el permiso oficial, las firmas deben pedir a las empresas de servicios el llamado «mapa de interferencias» para conocer qué tendidos surcan el área de trabajo. Además, 48 horas antes de comenzar con la obra deben dar aviso para que enviemos un técnico al lugar, de modo de efectuar sondeos previos in situ. Nada de esto sucedió", sostuvieron los voceros.
La ronda de consultas con las empresas de servicios resulta fundamental, ya que no existe un mapa único y completo del subsuelo porteño que suministre esta información, aun cuando hace diez años se aprobó una ley en tal sentido.
Hace una semana, una tuneladora al servicio de Telmex SA destrozó dos líneas de alta tensión, de 132 kv cada una, en la zona del Palais de Glace, lo que originó un apagón que afectó a 90.000 clientes en Barrio Norte, Recoleta y Palermo. Como paliativo, Edesur instaló 83 generadores, primero, y luego colocó otros 12 de gran porte en la plaza Vicente López para abastecer en la emergencia a los domicilios afectados. Según la empresa, eso insumió una erogación de $ 100 millones.
Una de las dos líneas ya fue reparada y voceros de la concesionaria estimaron que la segunda estará lista pasado mañana. Si bien el servicio ya está siendo prestado con la línea restablecida, permanecen instalados los generadores extra. La desconexión de los generadores provisorios y la reinstalación de la línea original puede provocar cortes momentáneos, se informó.
Según el subsecretario Silvosa, en la ciudad se concretaron 114.000 obras similares a la de Ibercom-Telmex durante 2014 y otras 89.000 este año, todas sin inconvenientes. "Cuando Edesur informe formalmente a qué altura ocurrió el impacto y se confirme que Telmex excavó a una profundidad no autorizada, haremos la denuncia ante la justicia", agregó.
La Justicia federal, mientras tanto, activó la denuncia presentada por el Ministerio de Planificación Federal contra Ibercom Multicom, Telmex SA y los organismos porteños a cargo de controlar la obra.
El fiscal Franco Picardi pidió al juez federal Luis Rodríguez medidas de prueba relacionadas con el rol de las empresas y de los funcionarios públicos en los sucesos.
Según la denuncia, los directivos de Telmex actuaron con negligencia "por no controlar a su personal dependiente y al personal de la contratista". Respecto a la presunta responsabilidad del gobierno porteño, indicó que al autorizar la obra, no solo tenía "el deber de proporcionar la información adecuada para evitar cualquier incidente, sino que no podía ser ajena la existencia del tendido de la red eléctrica en el área de influencia de la obra".
Silvosa rechazó los argumentos. "El mapa de interferencias lo proveen las empresas de servicio. La Ciudad chequea que el contratista tenga la documentación en orden y autoriza una profundidad de trabajo. La responsabilidad posterior es privada", explicó.
Informe de Laura Rocha