Animales de compañía: autorizan a los geriátricos porteños a adoptar y recibir visitas para mejorar la vida de los residentes
Lo aprobó la Legislatura; se considera que tener un perro o un gato promueve la socialización, disminuye la ansiedad y obliga a hacer ejercicio
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En los últimos años, los animales de compañía se convirtieron en afectos indispensables y, en muchos casos, en un integrante más de la familia. En ese contexto, la Legislatura porteña acaba de dar un paso fundamental que podría mejorar la vida de cientos de adultos mayores que se encuentran internados en instituciones geriátricas.
Durante la sesión ordinaria de hoy, por unanimidad de 55 votos, los legisladores aprobaron un proyecto que establece que se podrá adoptar una mascota en aquellas residencias en que las fuera posible, siempre que haya acuerdo de las personas mayores alojadas lúcidas o de sus representantes en el caso de las personas con deterioro cognitivo, suficiente espacio físico al aire libre de acuerdo a las dimensiones del establecimiento y a la cantidad de alojados, así como un recinto apartado para el animal.
Además, aquellas personas mayores que tuvieran un animal de compañía con anterioridad a su ingreso, podrán recibir su visita en los días y horarios que sean acordados con el establecimiento, siempre que cuenten con un certificado veterinario.
Contemplando el ingreso de las mascotas a las instituciones, el texto también establece que en aquellos casos que sea posible se incluyan intervenciones terapéuticas asistidas con animales.
Respecto de la ley aprobada, la presidenta de la Comisión de Políticas de Promoción e Integración Social, Laura Velasco (Frente de Todos), señaló: “Después de reunirnos con las asociaciones de geriátricos y consultar a trabajadores del sector, avanzamos en un proyecto de consenso entre distintos bloques legislativos que actualiza la ley vigente y la mejora en beneficio de la calidad de vida de las personas mayores, incorporando una propuesta innovadora que es la inclusión de mascotas y de intervenciones terapéuticas asistidas con animales donde hubiera condiciones edilicias y acuerdo de las personas residentes”.
En tanto, la presidenta de la Comisión de Salud, Ana María Bou Pérez (Vamos Juntos), afirmó: “Es un placer trabajar con las legislaciones que tienden al cuidado de nuestros vecinos. Esto empezó con la pandemia y lo positivo que nos dejó esa etapa fue que acercó al Poder Ejecutivo y los geriátricos, entonces pudimos empezar a pensar en estos cambios. La Ley fue distribuida, trabajada y modificada en muchísimos artículos, todos los diputados aportaron para que esta ley llegue al recinto”.
Cabe señalar que la iniciativa, en rigor, fue presentada por el bloque oficialista Vamos Juntos y contempla una serie de cambios al actual régimen de instituciones geriátricas, entre las cuales se incorporó la propuesta del legislador Juan Manuel Valdés (Frente de Todos) y del Sindicato de Trabajadores Caninos.
Tras la aprobación de la medida, Valdés explicó a LA NACIÓN: “Estar en contacto con sus mascotas o animales especialmente entrenados para la asistencia mejora su estado anímico, potencia sus capacidades sociales y colabora con la disminución de los niveles de ansiedad. La experiencia internacional demostró que este tipo de terapias y actividades brinda beneficios integrales a la población que vive en residencias geriátricas”.
En ese sentido, en la ciudad ya funciona el programa de la Secretaría de Bienestar Integral del Ministerio de Salud porteño, que se llama Compañeros +60, que tiene por objetivo concientizar sobre los beneficios que aporta a la salud y al bienestar de los adultos mayores el vínculo con los animales de compañía.
Más allá del ingreso de las mascotas a los geriátricos, las modificaciones a la norma también implicaron cambios en la atención de los adultos mayores, como por ejemplo: los directivos de estas instituciones deberán capacitarse contantemente, para garantizar una buena atención y los residentes deberán tener por lo menos un registro de presión arterial semanal, en los casos en que no se registre indicación médica que solicite una prescripción diferente.