Amor porteño, Palo Santo y Mapuches: cuáles son los nuevos nombres de las calles de la villa 31

El proceso se inició en 2018 y fue aprobado por la Legislatura porteña; los residentes participaron de la elección de las denominaciones

8 de julio de 2022
16:30
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LA NACION

Una mujer residente en la villa 31 muestra el cartel de denominación de la calle y el número donde se ubica su vivienda

Mapuches, Techuelches, Amor Porteño o Palo Santo son algunos de los nuevos nombres que recibieron las calles de la Villa 31, el primero de los barrios populares de la ciudad de Buenos Aires en contar con todas las trazas con denominación. De esta forma se terminó de saldar una deuda histórica con los habitantes del barrio en un proceso que se abrió en 2018 con la selección de las propuestas.

Antes de los cambios en las denominaciones las casas eran ubicadas por el número de la manzana y el correspondiente a la vivienda, una complicación para los residentes al momento de recibir correspondencia o realizar trámites. Los nuevos nombres permitirán ahora incorporar, por ejemplo, la dirección al DNI o al curriculum vitae, que los comercios puedan aparecer en Google Maps y otros beneficios.

En 2020 la Legislatura porteña aprobó el cambio de nombres de todas las calles de la Villa 31

La elección de los nombres se dividió en cinco etapas. Primero se presentaron y acordaron las categorías para la denominación de las calles y espacios públicos y luego se seleccionaron las definitivas y se inició la votación de los residentes. Una vez establecidas las categorías comenzó la selección de las denominaciones y las propuestas de los vecinos que fueron incorporadas al proyecto.

En diciembre de 2020 se terminó de concretar la propuesta con la aprobación de la ley en la Legislatura porteña, un paso que el gobierno de la ciudad consideró fundamental para la urbanización e integración del barrio. “Mientras muchas personas dan por sentado que tener una dirección es una obviedad esto es una deuda que aún permanece en los barrios populares del país”, se mencionaba en el debate en el recinto.

Las modificaciones más importantes en las calles principales de la villa 31 hacen referencia a Reservas Naturales de América Latina. Cataratas del Iguazú, Mbaracayú, Ulla Ulla, Los Manglares, Isla de Pascua, Machu Picchu, Cerro de los Siete Colores, Galápagos, Talampaya y Futaleufú son las elegidas para las calles transversales a la Avenida Figueroa Alcorta.

Mientras que las calles horizontales, es decir paralelas a esa avenida, remiten a la fauna autóctona de la región. En este grupo se encuentran Yaguareté, Colibrí, Alpaca, Puma, Llama, Águila, Guacamayo, Yacaré, Vicuña, Aguará Guazú, Armadillo, Guanaco, Huemul, Ciervo de las Pampas y Quetzal.

Además dos calles llevan denominaciones vinculadas a la historia del barrio de Retiro. Para recordar la fecha de la sanción de la ley de la Ciudad que dispuso la urbanización de la Villa 31 se eligió 3 de Diciembre de 2009; y en memoria del militante asesinado por la Policía Federal en marzo de 1974, se renombró la calle 9 por Alberto Chejolan.

Antes de los nuevos nombres las casas se ubicaban por número de manzana y de vivienda

Conga, Polca, Malambo, Caporales, Marinera, Chamamé, Mambo, Bolero, Ranchera y Bailecito son los nombres elegidos para los espacios públicos.

El proyecto fue trabajado por la Secretaría de Integración Social y Urbana, la Dirección General de Patrimonio, Museo y Casco Histórico (dependiente del Ministerio de Cultura), la Dirección General de Participación Ciudadana y la Legislatura porteña.

“La apertura de calles en barrios populares con sus nombres representa todo lo que buscamos en los procesos de integración socio urbana. Queremos que todos los vecinos de la ciudad puedan acceder a servicios, que vivan en su barrio iluminado e integrado al entramado del resto de la ciudad”, manifestó la ministra de Desarrollo Humano y Hábitat, María Migliore.