La pick up de Toyota nació en 1968 y va por la octava generación; en la Argentina se fabrica desde 1997 y hoy representa el principal modelo de exportación de la industria automotriz local, con llegada a 23 países de la región; cómo fue cambiando, desde la primera unidad a la actual
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Nació en marzo de 1968, como la sucesora de los modelos Stout y Briska. En ese momento, Toyota desarrolló una nueva pick up para que produzca su flamante socio Hino -hoy, marca de camiones y buses del grupo- en su planta de Hamura, Japón. Y la bautizó “Hilux”, por la fusión de las palabras “high” (alto, en inglés) y “luxury” (lujo).
Así surgió la pick up mediana que se transformó en un hito para la automotriz japonesa en todo el mundo y que desde el inicio de su producción en la Argentina, en 1997, fue adquiriendo cada vez más protagonismo hasta convertirse en el principal modelo exportado por la industria automotriz local.
Para celebrar los 55 años, Toyota recorrió la historia de la pick up. La primera Hilux llevaba un motor de 1,5 litros con 4 cilindros en línea y 70 CV. Era el mismo motor del camión liviano Toyoace, cuya configuración era “cab-over”, es decir, con la cabina encima del motor. La flamante Hilux, por el contrario, era del tipo con capot. Traía una transmisión manual de 4 velocidades con palanca de cambios al volante, lo cual habilitaba el espacio del habitáculo para tres ocupantes. Pesaba 1040 kg y su capacidad de carga era de una tonelada.
Además de Japón, la Hilux fue vendida en Australia y Arabia Saudita, para luego llegar a los Estados Unidos donde, junto con otros modelos como el Corolla y el Land Cruiser, contribuyó a consolidar a la marca en el competitivo mercado estadounidense. Pocos años después, Hilux ya se producía en Tailandia y Sudáfrica.
La segunda generación de Hilux, lanzada en 1972, sumó la versión “Highway” que incorporaba por primera vez una caja automática de piso y dos asientos frontales, además de un motor más potente. En 1978, apenas 10 años después de su lanzamiento, Toyota ya había exportado más de un millón de unidades de la Hilux.
La llegada de la Hilux a la Argentina
Las primeras Toyota Hilux llegadas desde Japón a la Argentina pertenecían a la tercera generación del modelo (1978-1983), que fue clave para la primera etapa de la marca en el país. Con aquella generación, la pick up incorporó por primera vez un motor diésel y tracción en las cuatro ruedas en algunas de sus versiones. Y también sumó la doble cabina por primera vez.
Con la cuarta generación (1983-1988), recordó la marca, la Hilux profundizó su oferta de soluciones, con versiones más orientadas al trabajo y otras más recreacionales, con las prestaciones y el confort de un sedán. En 1984 se presentó el primer SUV de la historia de Toyota, lanzado como Hilux Surf en Japón y que en otros mercados se llamó 4Runner, el nombre que conserva hasta hoy.
La quinta generación de Hilux (1988-1997) fue diseñada bajo tres conceptos según Toyota: potencia, robustez y confort. Se introdujeron mejoras en la suspensión y la barra de torsión para otorgarle un mejor confort de marcha, algo que era inhabitual para el segmento.
A principios de los años 90, la automotriz decidió iniciar la construcción de una nueva planta en América Latina dedicada a la producción de Hilux. El modelo lucía muy atinado para una región con predominancia de actividades como el agro o la minería. El lugar elegido para la fábrica fue la Argentina, en la localidad de Zárate, una ubicación clave por su conexión con las principales rutas de la región, cercanía con el entramado autopartista, terminales portuarias y acceso a la energía.
En 1997 comenzó la producción de las primeras 10.000 unidades de Hilux, vendidas en la Argentina y Brasil. Y en 2002, la automotriz anunció una inversión de US$200 millones para la renovación de la planta y producir en Zárate la plataforma IMV (Innovative-Multipurpose Vehicle), de la que surgiría la séptima generación de la Hilux.
Para entonces, la pick up ya se comercializaba en 140 países. La séptima generación ganó espacio interior y confort de marcha, además de albergar en la misma línea de montaje al SUV SW4, que nació también de la plataforma IMV.
El agro fue un actor clave para el crecimiento de la Hilux en la Argentina, admite hoy la automotriz, no solo porque los clientes demandaban un vehículo de calidad, durable y resistente (QDR, por sus siglas en inglés) sino porque escuchar a esos clientes fue fundamental para los desarrollos posteriores. La pick up se convirtió en el modelo más vendido de su categoría en 2005 y desde ese momento hasta hoy lidera el mercado.
Octava generación
En 2015 se presentó la octava generación, con la plataforma con la que se produce en la actualidad. Desde entonces, la Hilux se consolidó como la pick up más vendida en América Latina y en un pilar para la marca: casi 4 de los 10 vehículos que vende Toyota en la región son este modelo.
Toyota Argentina lleva producidas 1.800.000 unidades de Hilux y SW4. Para 2023, el plan de producción es de 182.000 unidades. El 80% se exporta a 23 países de la región. Para alcanzar esa cifra, por primera vez en su historia, la planta de Zárate trabaja desde este año a tres turnos, las 24 horas. La integración local de partes de la Hilux es del 40%, y más de 65% de contenido regional en total.
Por el desempeño de la pick up tanto en el mercado externo como el interno, la automotriz japonesa se convirtió en 2021 y 2022 en líder en ventas en la Argentina. Otro logro que permitió a la filial local fue la intervención en el desarrollo del modelo Hilux GR Sport, la versión deportiva de la camioneta que ya va por su cuarta generación y también se hace en la Argentina.
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