La medida que impulsan en el Reino Unido busca evitar distracciones al volante y aplicar una penalización a quienes consuman cualquier tipo de cigarrillo mientras manejan
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De más está decir que al volante, la responsabilidad es mucho mayor. Cuando se maneja, se es responsable no solo de la propia vida y de la de quienes viajan a bordo del mismo vehículo sino la de todo el entorno. Peatones y otros conductores son sensibles a lo que puede ocurrir y una distracción, por más mínima que sea, puede provocar un accidente fatal.
Sobre la base de esa premisa es que hay campañas en todo el mundo que intentan limitar las tareas de los conductores. La idea es que se concentren en el camino y en las maniobras, que respeten las señales de tránsito y puedan manejar lo más correcto y seguro posible para así minimizar el índice de fatalidad. En su momento, se prohibió el uso del celular y medidas de distinta índole buscaron penalizar a quienes usen dispositivos mientras conducen.
Pero ahora, la mira está puesta en otra acción que, según confirman expertos, puede resultar distractiva y riesgosa: fumar al manejar. No se trata de algo nuevo, sin embargo. Ya hace tiempo figura una advertencia para que se evite este comportamiento en el artículo 148 del Código de Circulación (Highway Code, su nombre en Inglés).“Manejar requiere concentración. Hay que evitar distracciones cuando se maneja como hacerlo con música fuerte, leer mapas en marcha, manipular la radio, discutir con pasajeros u otros conductores, comer, beber y manejar”, se detalla.
No obstante, lo que se está debatiendo en estos tiempos es poder aplicarle una multa a quienes fumen y manejen. La propuesta surge en el Reino Unido e implicaría una penalización de 2500 libras, quita de nueve puntos de scoring e incluso la retención temporal de la licencia. A su vez, en caso de que la conducta lleve a un accidente grave y que se pruebe que se distrajo por este comportamiento, “se implementarían consecuencias más severas como la prisión”, señalaron desde el portal The Sun.
Se trata de una idea que empezará a debatirse en los próximos días y cuya implementación podría llegar -o no- en un futuro cercano. Lo que sí existe hasta el momento es una multa de entre 50 y 100 libras para quienes fumen con menores de 18 años a bordo del auto. Esa ley existe desde 2015 y su objetivo es “proteger a los chicos y jóvenes de los efectos de la inhalación pasiva del humo del cigarrillo”.
LA NACION