Por falta de piezas, Fiat tuvo que parar la producción hoy en Córdoba

La planta de Fiat en Córdoba, donde la automotriz italiana fabrica el sedán Cronos, tuvo que frenar la producción hoy miércoles por falta de piezas importadas. La traba en el abastecimiento se debió a las demoras en las autorizaciones que está causando en varias industrias el nuevo sistema oficial SIRA de control a las importaciones.

Fiat, que forma parte del grupo Stellantis, debió suspender el turno de la mañana de hoy, y a la tarde realizó trabajos específicos sin movimiento en la línea de montaje, confirmaron fuentes de la compañía a LA NACION. Mañana jueves retomará la producción con normalidad.

El obstáculo se debió a los retrasos en las autorizaciones a sus proveedores para ingresar piezas importadas que está generando la implementación del SIRA, el nuevo sistema de seguimiento de las importaciones que puso en marcha el Gobierno hace 10 días. Desde Fiat aclaran que las piezas ya están en poder de los proveedores, de modo que solo se trata de una cuestión de autorizaciones para destrabar el flujo de producción.

El jueves último, Renault y Nissan –que también fabrican en Córdoba, en la planta de Santa Isabel- se vieron obligados a frenar la línea de producción de las pick ups Frontier y Alaskan por el mismo motivo, la falta de insumos importados. El viernes volvieron a producir.

En la planta de Ferreyra, Fiat produce el sedán Cronos, el auto número uno en ventas en el mercado local. Hace un mes, alcanzó las 250.000 unidades fabricadas desde su lanzamiento, en 2018. Las proyecciones para este año contemplan una producción de 80.000 unidades, que marcaría un récord para la fábrica.

Además de ser el auto que encabeza los patentamientos en el mercado local, el Cronos es el modelo con mayor integración local de partes: un 46%. Pero el resto de los componentes llegan del exterior –muchos de ellos, de Brasil-. El 57% de la producción del Cronos se exporta al país vecino.

Por problemas en el abastecimiento de autopartes, la industria automotriz trabajó durante todo el año al borde de las interrupciones. En la última semana de septiembre, Toyota y Ford tuvieron que parar varios días su producción por falta de cubiertas a raíz del largo conflicto entre el sindicato del neumático y las fábricas productoras. Y meses atrás también otras plantas se vieron obligadas a detener su producción durante un día o dos por faltantes de partes. Además de la crisis de los neumáticos, el sector automotor sufre a escala global problemas de escasez de microchips.

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