Estos son los 10 autos más rápidos del mundo que desafían los límites de la velocidad
Con sus motores potentes e ingeniería aerodinámica reconfiguran el concepto de velocidad extrema; qué modelos integran el ranking
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En un mundo donde la velocidad es sinónimo de poder, los autos más rápidos del planeta encarnan la obsesión humana por desafiar los límites. Estas máquinas son obras maestras de ingeniería y diseño, creadas para rasgar el aire con precisión y furia. Cada uno de estos superautos, con sus líneas aerodinámicas y motores rugientes, parece emular el sueño imposible de superar la velocidad del sonido en tierra firme. Como si fueran cazadores de un horizonte inalcanzable, rompen el silencio con un rugido que se asemeja a una explosión sónica, llevando a sus conductores a los umbrales del tiempo y el espacio, donde la realidad se distorsiona y solo queda la pura esencia de la velocidad.
El listado publicado por el sitio especializado Car and Driver ofrece una visión detallada de las diez máquinas más rápidas del mundo en este momento, destacadas por su capacidad para redefinir los límites de la ingeniería automotriz.
Cada modelo, desde hiperdeportivos que alcanzan niveles casi perfectos de rendimiento hasta diseños que encapsulan la esencia misma de la velocidad, representa un testimonio del ingenio humano y su incansable búsqueda por superar lo que alguna vez se consideró inalcanzable. Estos autos no son meros medios de transporte, sino monumentos a la innovación y al poder de la determinación.
10. SSC Ultimate Aero TT (411 km/h)
El SSC Ultimate Aero está equipado con un motor V8 biturbo de 1.199 CV y 1.302 Nm, y una carrocería optimizada para alta velocidad, logró alcanzar una velocidad media de 411 km/h en dos carreras. Este desempeño le valió el récord Guinness como el coche más rápido del mundo, título que sostuvo hasta 2010, cuando el Bugatti Veyron SS lo superó.
9. Rimac Nevera (412 km/h)
Entre noviembre de 2022 y mediados de 2024, el Rimac Nevera fue reconocido como el vehículo eléctrico más rápido del mundo, alcanzando una velocidad máxima de 412 km/h en una prueba realizada en la pista alemana de Automotive Testing Papenburg. Desarrollado a partir del Rimac C Two, este modelo de producción se destaca por sus 1.914 CV y 2.360 Nm, junto a una aerodinámica avanzada con un coeficiente de arrastre de 0,30 Cd. También logró un récord absoluto al recorrer 0,40 km en solo 8,74 segundos, alcanzando una velocidad de 266 km/h. Aunque las versiones para clientes estarán limitadas a 350 km/h, Rimac permitirá desbloquear esa limitación en eventos especiales, manteniéndolo a la par de los super deportivos de combustión.
8. Bugatti Chiron (420 km/h)
Después del éxito del Veyron, Bugatti simplificó el camino para su sucesor con el Bugatti Chiron, lanzado en 2016. Este hypercar mantuvo un diseño similar pero mucho más moderno y, por supuesto, el impresionante motor W16 de 8.0 litros de su predecesor, ahora con 1500 CV distribuidos a las cuatro ruedas. El Chiron estándar alcanza los 420 km/h, y ha sido mejorado en varias versiones que han elevado aún más su rendimiento.
7. Bugatti Veyron Super Sport (430,98 km/h)
Tras romper la barrera de los 400 km/h con el Veyron en 2005, Bugatti elevó aún más el estándar con el Veyron Super Sport. Esta versión mejorada presentaba una carrocería más aerodinámica y un motor W16 de 8.0 litros con 1.200 CV. En 2010, alcanzó los 430,98 km/h y ganó el Récord Guinness, aunque más tarde se invalidó por diferencias con las versiones de producción, que tienen un limitador de velocidad a 415 km/h para proteger los neumáticos.
6. Hennessey Venom GT (435 km/h)
En 2014, Hennessey, la marca estadounidense conocida por sus preparaciones, lanzó el Venom GT, un super deportivo basado en el Lotus Exige. Equipado con un motor V8 turbo de 6.2 litros y 1.244 CV, alcanzó 432,5 km/h en el Centro Espacial Kennedy, arrebatándole el récord al Bugatti Veyron Super Sport y entrando en el Libro Guinness. Ahora buscan repetir la hazaña con su sucesor, el Venom F5, que ya está en fase de pruebas.
5. Hennessey Venom F5 (435 km/h)
El Hennessey Venom F5, sucesor del Venom GT, debutó con su poderoso motor V8 Fury de 6.6 litros biturbo y 1.842 CV, con el objetivo de alcanzar los 500 km/h. Aunque aún no ha logrado esa velocidad, en pruebas recientes en la pista de Johnny Bohmer, Florida, el F5 ya igualó a su predecesor al alcanzar 435 km/h en marzo, acercándose a su ambicioso objetivo.
4. Aspark Owl SP600 (438.7 km/h)
El Aspark Owl SP600, una evolución del exótico Aspark Owl, se convirtió en el coche eléctrico más rápido del mundo al superar al Rimac Nevera. En junio de 2024, alcanzó 438,7 km/h en Papenburg. Aunque este récord fue logrado por una unidad de preproducción sin retrovisores laterales y con neumáticos Bridgestone Potenza Race a medida, se espera que el modelo llegue a producción.
3. Koenigsegg Agera RS (447,2 km/h)
Fundada por Christian Von Koenigsegg, la marca sueca siempre ha competido con Bugatti en la creación de hypercars “caza-récords”. En 2017, la versión más extrema del Agera, el Koenigsegg Agera RS, se coronó como el coche más rápido del mundo al alcanzar 447 km/h con su motor V8 biturbo de 5.0 litros y 1160 CV. Además, estableció un nuevo récord en la prueba 0-400-0 km/h con un tiempo de solo 36,44 segundos.
2. SSC Tuatara (460,43 km/h)
El SSC Tuatara ostenta el título de coche más rápido del mundo según el Récord Guinness. En 2021, la última creación de SSC North America logró oficialmente alcanzar una velocidad media de 455,28 km/h en dos carreras en sentidos opuestos, con una máxima de 460 km/h. Este récord llegó después de una primera tentativa polémica en la que se reportaron velocidades de 508,74 km/h y 532 km/h, pero las irregularidades en la medición llevaron a una repetición del intento. El Tuatara, con 1250 CV de base y hasta 1750 CV con combustible E85, finalmente aseguró su lugar en la cima.
1. Bugatti Chiron Super Sport 300+ (490,48 km/h)
Aunque el Guinness no acreditó el récord del Bugatti Chiron Super Sport 300+, este modelo mejorado, con 1600 CV y una carrocería alargada, logró en 2019 acercarse a los 500 km/h en el circuito de Ehra-Lessien, conocido por sus pruebas de alta velocidad. Con una velocidad máxima de 490,48 km/h, el Chiron Super Sport 300+ se convirtió en el coche de producción más rápido de la historia. Posteriormente, se produjo una serie limitada de 30 unidades, cada una con un precio de aproximadamente 3,5 millones de euros, aunque estas versiones están limitadas a 440 km/h.
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