Por la actualización de las escalas del impuesto al lujo, tres SUV de Jeep valen menos en mayo que en abril; cómo quedó la gama del Renegade, Compass y Commander
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La actualización de las escalas del impuesto al lujo, que entró en vigencia el 1° de mayo último y se extiende hasta el 31 de este mes, produjo grandes cambios en los precios de los 0km. Al subir los montos a $37.300.000 al público para el límite de la primera categoría del 20% y a $83.000.000 para la segunda del 35%, modelos que hasta el 30 de abril estaban alcanzados por el tributo quedaron afuera, lo que se tradujo en una baja de sus valores.
A medida que las automotrices van publicando sus listas oficiales (no todas lo hacen el primer día hábil del mes), nuevos vehículos se suman al grupo de los 0km con rebajas por el efecto impositivo. Tras los ejemplos de Volkswagen, Chevrolet y Nissan, ahora les tocó el turno a las marcas de Stellantis. Jeep es la automotriz que presentó más cambios en su lista dentro de las firmas del grupo nacido de la fusión entre FCA (Fiat Chrysler) y PSA (Peugeot Citroën): su SUV del segmento B (chico) Renegade, que en abril tenía tres de las cinco versiones impactadas por el impuesto al lujo, en mayo pasó a tener solo una.
En abril, el Renegade Sport 1.8 litros manual 4x2 (versión de entrada) y el automático costaban $28.057.500, y los otros tres sufrían el impacto del impuesto al lujo: el Longitude automático 4x2 saltaba a $41.488.400; el Serie S automático se ubicaba en $42.580.200, y el Trailhawk 4x4 tope de gama figuraba a $48.039.200.
Ahora, en mayo, los precios oficiales son los siguientes: Renegade Sport manual y automático, $28.900.000; Longitude, $35.266.000; Serie S, $36.000.000; y Trailhawk, $48.040.000. Sólo quedó la versión más cara dentro de la primera escala del tributo.
La baja de precios le llegó también al SUV mediano Compass, con toda su gama impactada por el impuesto del 20% en abril (entre $45.000.200 la entrada de gama Sport, y $58.448.700 la Trailhawk 4x4). En mayo, la Sport retrocedió a $37.120.000, por debajo del nuevo límite del tributo, y las demás se mantienen entre los $45 y $58 millones.
El SUV de tres filas de asientos Commander no quedó afuera de los cambios. Sus precios estaban expresados en dólares en abril, entre US$67.900 y US$90.500 las tres versiones (Limited automático de 6 y nueve marchas y Overland), y en mayo pasaron a valer entre $58.425.000 y $67.435.000, fuera de la segunda escala del 35% del impuesto.
En el caso de Citroën, la marca reacomodó la gama de su SUV C4 Cactus, “topeado” en abril en $27.258.000 (al límite del impuesto entonces) en tres de sus cuatro versiones. En mayo, la versión de entrada Feel cuesta $26.923.700 (subió poco menos de $500.000), y las tres siguientes van de $27.258.000 a $28.784.400 la tope de gama Noir. Es decir, muestran diferencias dado que tienen diferente equipamiento –algo que los “topeos” terminan desdibujando.
Por el lado de Peugeot, sus dos SUV que pagan el impuesto al lujo en la primera categoría, el 3008 y el 5008, no cambiaron de precio entre abril y mayo: figuran a $57.592.800 y $59.470.900, respectivamente. En cuanto a Fiat, no tiene modelos alcanzados por el tributo.
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