El multimillonario vendió casi ocho millones de acciones de su propia firma automotriz después de prometer hace unos meses que no volvería a hacerlo; los motivos detrás de su estrategia mediatizada
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Elon Musk vendió 7,92 millones de acciones de Tesla por un valor total de más de US$6900 millones, de acuerdo con un documento publicado en la página web de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), el ente regulador del país.
El número de acciones vendidas equivale a un 4,86% de la participación de las más de 162,9 millones que poseía. El multimillonario dijo al público que el motivo detrás de sus actos es “evitar una venta abrupta en el caso de ser forzado a continuar con la adquisición de Twitter”.
“En el caso (esperamos que poco probable) de que Twitter fuerce el cierre de este acuerdo y que algunos socios de capital no participen, es importante evitar una venta de emergencia de acciones de Tesla”, twitteo Musk, explicando que está en sus planes volver a comprar las acciones de las cuales se acaba de desprender, si su futuro con Twitter no se concreta. En relación a este posible último escenario, comentó que también considerará crear su propia red social.
Elon Musk vs Twitter: el estado de la negociación
El pasado julio, Musk se retiró de la negociación de la compra de Twitter, argumentando que el número de cuentas bot y spam de la red social infla significativamente el total de sus usuarios y, por ende, el valor de la firma. En otras palabras: el CEO de Tesla desafió al CEO de Twitter, Parag Agrawal, a debatir públicamente el porcentaje de cuentas falsas de la red, pidiéndole que “demuestre que Twitter tiene menos del 5% de usuarios falsos o no deseados”.
Como respuesta, Twitter demandó al empresario, instándolo a hacerse cargo del compromiso que él mismo promovió, y continuar con la compra al valor estipulado originalmente: US$ 44.000 millones. Musk contrademandó a Twitter en el mismo tribunal, reclamando no solo salir limpio del pacto, sino también obligando a la red social a pagar daños y perjuicios.
Esta seguidilla de desacuerdos y especulaciones mediatizadas y viralizadas resultó en una demanda de Twitter a Musk, con fecha de resolución prevista para octubre, mediante un juicio abreviado que durará cinco días. La batalla legal comenzará el 17 del mes en cuestión, ante un tribunal especializado en derecho comercial del estado de Delaware.
Según expertos que siguen el conflicto legal, las probabilidades de que el creador de Tesla termine pagando únicamente la indemnización por romper el acuerdo (o que la resolución judicial se acerque a cumplir con sus demandas) son bajas.
¿Se puede confiar en Elon Musk?
Esta no es la primera vez que Musk se contradice públicamente y vende sus títulos. En abril, después de vender acciones de Tesla por aproximadamente US$8500 millones anclándose en la preparación para la compra de Twitter, había asegurado que no habría otras ventas de acciones de Tesla. Sin embargo, a fines de ese mismo mes volvió a vender 4,42 millones de acciones por US$4000 millones.
Entre tweets y transacciones, Musk ya se desprendió del 12% de su participación en Tesla en el último año y obtuvo US$32.000 millones, fortaleciendo su posición de hombre más rico del mundo. Así y todo, sigue siendo el principal accionista de la firma automotriz, con un 14,8% de participación, según afirma la agencia Bloomberg.
Según explica Charu Charana, estratega de Saxo Capital Markets, el empresario multimillonario está aprovechando el rebote en las acciones de Tesla, que acumularon un alza de 35% desde fines de mayo, al mismo tiempo que se resguarda de posibles bajas en las acciones, con la previsión del endurecimiento de la política monetaria de la Reserva Federal en Estados Unidos.
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