En los últimos lanzamientos de nuevas generaciones de SUV y pick ups se imponen las líneas rectas y el estilo “retro”; cuáles son los modelos que adoptaron esta corriente y una mirada a los antecedentes
- 7 minutos de lectura'
Aunque a priori podríamos pensar que el cubismo es un movimiento antiguo, hay que irse “acá nomás”, hasta los albores del siglo 20, y, paradójicamente, encontrarse con la figura de Pablo Picasso como uno de los impulsores de esta corriente. Sí, justo Picasso, que hasta hace no mucho paseaba su firma en múltiples modelos de Citroën que, para colmo, en su mayoría lejos estaban del cubismo. Podemos discutir el C3 Picasso, pero partía de la base de un monovolumen que suele ceñirse a formas más rectilíneas.
Desde hace algunos años, la industria automotriz experimentó un revival del cubismo. Es cierto que hay modelos cuyo leit motiv es romper esquemas gracias a sus rectángulos, pero en los últimos años hubo modelos que enrocaron curvas por ángulos.
En esta nota, un repaso por los principales modelos que se sumaron a la nueva corriente de las formas cuadradas y el recuerdo de los exponentes más destacados del sector con ángulos de 90 grados en las últimas décadas.
Los nuevos
Por una cuestión de impacto, las primeras menciones tienen que ser dos que patearon el tablero: los Hyundai Santa Fe y Toyota Land Cruiser. La nueva generación del SUV mediano surcoreano fue toda una revelación y al mismo tiempo, tan sustancial que el título del comunicado oficial de la marca decía, literalmente: Hyundai transforma radicalmente a la totalmente nueva Santa Fe.
La quinta generación de la camioneta es un canto al diseño, con una transformación sustancial. Hyundai afirma que la nueva Santa Fe optó por una estrategia de diseño inusual y comenzando por algo también inusual como es el sector trasero: se trabajó en un remate más grande y a partir de ahí se elaboró el resto de la camioneta. ¿El resultado? Según la marca surcoreana, “una presencia poderosa con un diseño externo fuerte pero delicado, orientado a lo urbano y a lo naturista”.
El segundo exponente contemporáneo de este revival es el Toyota Land Cruiser, otro SUV histórico que, justamente, apeló a una regeneración de viejas líneas para volver a enamorar. Tras una pausa de tres años en el mercado del norte, Toyota volvió con todo bajo el lema de “las leyendas nunca mueren”, y rinde homenaje a su historia con ópticas redondas en la versión “1958″ (que homenajea a la serie 40) y rectangulares en la “Land Cruiser” que emula a la serie FJ62.
La nueva generación del emblemático SUV de Toyota saldrá a la venta en 2024 con una versión híbrida de 2,4 litros y 330 CV. También ofrecerá alternativas a combustión con otro tipo de motorizaciones, naftero turbo de 2,4 litros y 281 CV, y turbodiésel de 2,8 litros y 204 caballos.
En la línea de autos cuadrados podemos encontrar también a la conectada familia Bronco y Bronco Sport, un par que comparte genes entre ellos y cuya producción cesó a mediados de los noventa apenas unos años después del famoso incidente con OJ Simpson.
Veinticinco años después, Ford revivió la gama Bronco valiéndose de las plataformas de Kuga (Escape) y Ranger, dándole vida a la Bronco Sport y Bronco, respectivamente. Es tal la inspiración vintage que todo arrancó en un estudio de diseño de Ford con un escaneo digital de un modelo de primera generación a escala 1:1 que sirvió como inspiración para empezar a trazar ambas familias de modelos.
Siguiendo un poco la línea de la aventura, nos encontramos con el primer exponente que quizás no sea del todo familiar: el Rivian R1S. Presentada en 2018 en el Salón de Los Angeles, es un SUV que se viene cocinando hace ya varios años, pero que debido al tamaño de la empresa y las complicaciones financieras, recién se lanzó en 2022. Es un SUV de tres filas de asientos, 100 % eléctrico, que tiene un precio base de US$80.000.
Otra pick up que por estas horas apeló a las formas cuadradas y al estilo vintage es la edición especial Hardbody de la Nissan Frontier, presentada para el mercado estadounidense. El modelo para ese país –diferente al que se fabrica en la Argentina- incorporó en su edición especial detalles retro en la parrilla, con apliques plásticos negros que emulan el estilo de las camionetas de la década del 80. Los detalles cuadrados son acompañados por las llantas que remiten a los viejos modelos y logotipos con la inscripción 4x4, como se usaba entonces.
Las formas retro solo quedan para el exterior, ya que la pick up viene equipada por dentro con los elementos de confort y seguridad de hoy. Motor V6 de 3,8 litros, con 310 caballos, caja automática de nueve marchas, tracción 4x4 desconectable y una batería de asistentes a la conducción (ADAS) entre otros componentes de seguridad.
El último de la lista es uno que se sumó hace poco a las filas de Toyota en la Argentina y hace unos meses se confirmó que se fabricará en Zárate a partir de 2024. Se trata del Hiace, un modelo que, aunque para el mercado local sea relativamente nuevo, encuentra sus orígenes a mediados de los sesenta. El que llegó a la Argentina en 2019 es la sexta generación, posiblemente el vehículo más cuadrado que ofrece el mercado local hoy.
Toyota comenzará a ensamblar el Hiace en Zárate a partir de 2024, a través del nuevo régimen para el sector automotor conocido como IKD (de vehículos incompletos cuyas partes son importadas para su armado local, con un complemento nacional). El Hiace se armará en dos versiones, furgón y para pasajeros. Toyota proyecta ensamblar unas 4000 unidades iniciales y exportar a Brasil, como primer destino.
Los clásicos
Pero independientemente de este revival por los autos cuadrados, hubo modelos precursores, muchos de ellos todavía en venta a nivel global o en la Argentina. En orden alfabético y posiblemente con el nombre más representativo, aparece el Fiat Qubo, un modelo que se lanzó en Argentina en 2011 y duró algunos años. Fue una buena alternativa para los multipropósito de siempre (Partner, Berlingo, Kangoo), ya que tenía variantes para pasajeros y furgón.
En esa misma tónica se ubica el Cube. El modelo de Nissan también lleva la bandera –y el nombre- del poliedro, aunque lo hace desde antes del 2000, con lo cual la historia le da la derecha. El vehículo, un monovolumen compacto, no es conocido en la región ya que la marca japonesa solo lo vendió en Estados Unidos, Europa y Japón. Duró hasta 2019.
Entre los SUV, hay otros antecedentes. Apuntado a otro público y ya por su cuarta generación, el Jeep Wrangler (y su primo Gladiator) es otro clásico “boxy”: en la Argentina se comercializa en variantes Rubicon y Sahara y pese a los años que hace que se vende en el mercado, siempre mantuvo sus ángulos como linaje.
El Jeep fabricado en Toledo, Ohio, permite abrir el capítulo de los SUV cuadrados: Land Rover Defender y Mercedes-Benz Clase G, otras dos camionetas que enarbolan la bandera de los rectángulos. El primero es un clásico de clásicos y atravesó todo tipo de historias en sus casi setenta años de producción. En 2016 se fabricó el último Defender, después de más de dos millones de unidades producidas y tres años después se anunció el revival de la icónica camioneta, aunque con un look más moderno.
La tercera de la saga es la Mercedes-Benz Clase G, un vehículo que también prestó servicios variopintos: desde milicia hasta papamóvil. De hecho, el ejército argentino fue uno de los primeros clientes del modelo. En la actualidad, la G-Class figura a la venta en el mercado local por un precio de US$388.500.
Otras noticias de Autos
- 1
Sin patentes: el Gobierno autoriza una alternativa para circular y salir del país ante la falta de chapas
- 2
Un auto de producción en serie le ganó al “infierno verde” y entró a un ranking histórico
- 3
Ford Territory: la evolución del diseño y el espacio interior
- 4
Cuánto cuesta la Volkswagen Amarok en diciembre 2024