Autos con “precios justos”: el Gobierno quiere limitar las subas de los 0km

El Ministerio de Economía está negociando con las automotrices un esquema de subas acotadas de precios de los 0km para los próximos meses, lo que implicaría la entrada del sector al programa de Precios Justos que rige para los artículos de consumo masivo. De esa discusión, que debería resolverse en las próximas horas, dependería la actualización de las escalas del impuesto al lujo a los autos, demorada por cuestiones técnicas desde el último jueves 31 de agosto.

Una fuente del sector confirmó a LA NACION que en el marco del diálogo que las terminales mantienen con las autoridades del Ministerio hay “un combo de temas”, en el que figura al tope de la agenda la liberación de las unidades paradas en el puerto de Zárate. Hace más de dos meses que el Gobierno no autoriza el ingreso de autos importados por la falta de dólares.

Si bien –según la fuente consultada- no hubo una mención explícita al tema como moneda de cambio durante las negociaciones, en las terminales entienden que las autorizaciones para importar autos están atadas a que el sector firme un acuerdo de precios con el Gobierno para los próximos meses.

Los detalles que puede adoptar ese acuerdo todavía no están cerrados. Podría establecerse un tope a los incrementos porcentuales de los 0km en septiembre y octubre, o permitir un aumento mayor este mes para “congelar” los precios el mes que viene, cuentan en el sector. La idea del Palacio de Hacienda es que cada terminal contribuya con algún modelo de su gama (los de menor precio, preferentemente) al esquema de Precios Justos, si es que finalmente el acuerdo ingresa bajo ese rótulo.

A raíz de esta negociación, el sector opera en este momento en la incertidumbre total, sin precios nuevos en la red de concesionarios. Los autos venían subiendo entre 5 y 7% por mes hasta fines de julio, cuando el Gobierno aplicó el impuesto PAIS del 7,5% a los productos importados. Durante agosto, hay marcas que aplicaron dos aumentos de hasta el 20% acumulado para absorber el impacto de ese impuesto y acompañar la inflación, y otras que decidieron no mover sus precios hasta el 1° de septiembre. El lunes 14 de agosto, el Banco Central devaluó 22% el dólar oficial (a $350).

La definición de precios ahora postergada estaba atada, además, al cambio de las escalas del impuesto al lujo para los autos, que debía entrar en vigencia el viernes último. La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ajusta cada tres meses los parámetros del tributo en función de la variación de precios acumulada, y las automotrices construyen sus listas a partir de esos límites.

Hasta el jueves 31 de agosto, pagaban la primera escala del 20% del impuesto los 0km con un precio superior a los $5.893.963,10 salido de fábrica o distribuidor, lo que equivalía a $8,4 millones de precio de venta al público (al incorporar los otros impuestos, como el IVA, y la comisión del concesionario, que suele ser 14%). Sobre ese monto se aplicaba el 20% para determinar el precio final que pagaba el comprador.

La segunda escala del impuesto, que grava con el 35% a los modelos, arrancaba en $10.881.162,65 de precio salido de fábrica, lo que se traducía en $15,5 millones de precio de venta al público de base, sobre el que hay que añadirle el 35%.

Por la forma en la que se calculan los impuestos internos, la aplicación del 20% del impuesto al lujo se transforma en una suba del 25% en el precio que paga el comprador en el concesionario. Y, en el caso de la segunda escala, del 35%, el modelo se encarece hasta un 50%. De ahí que entrar o no en cada categoría es determinante para un modelo de auto.

La distorsión que provoca en el mercado es tal que las marcas “topean” sus modelos para evitar que caigan dentro de la primera o la segunda escala del gravamen, y publican al mismo precio autos de distinta versión y equipamiento.

La AFIP no difundió hasta ahora la resolución con las nuevas escalas y del incremento porcentual que defina el organismo dependen las listas de precios de los 0km para este mes.

A la espera de la negociación con el Gobierno, y sin listas definidas para septiembre, varias marcas levantaron desde el viernes los precios de los 0km de sus sitios oficiales.

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