Cuando en la calle hacen 32°C, el motor de un auto promedia los 60°C; las claves para evitar desperfectos técnicos y cómo cuidarlo del sol intenso
- 3 minutos de lectura'
Cuando llega el verano, las altas temperaturas no se esconden y así como muchos sufren las inclemencias del clima, los autos no son la excepción. El aire acondicionado se transforma en el mejor aliado -aunque hay que saber bien cuándo usarlo para no deteriorarlo- y la precaución se vuelve una herramienta necesaria. El calor intenso puede romper el auto y saber qué puede ocurrir, nos prepara para buscar la mejor solución.
Tal y como lo explicó Neumen Performance Center en diálogo con LA NACION, cuando la temperatura exterior promedia los 32°C, la del auto (el motor y la parte mecánica) puede elevarse hasta los 60°C. El asfalto se calienta mucho y quienes reciben el primer impacto son los neumáticos. “La consecuencia más directa es que los pinchazos se multiplican. Se recomienda en los meses de verano mantener la presión mínima recomendada por el fabricante y se sugiere el inflado con nitrógeno: este gas mantiene el interior del neumático más fresco, disminuyendo las consecuencias de las altas temperaturas”, explicaron desde el centro.
Al motor también hay que mirarlo de cerca. Como primera medida, se debe chequear el líquido de refrigeración de manera regular y agregarle agua destilada las veces que sea necesario. El aceite también debe observarse de cerca, reemplazarlo y cambiar el filtro si la situación lo amerita.
Por otro lado, está la batería. “El calor extremo la debilita y acorta su vida útil. Es importante mantener al vehículo lo más fresco posible estacionándolo en un garage o al aire libre bajo un toldo o árboles”, comentaron desde Neumen.
Los frenos, la carrocería y el interior sufren al igual que todo lo antes mencionado. En el caso de los primeros, se debe a que los fluidos del auto se ven perjudicados por el calor y el líquido de frenos puede evaporarse a causa de temperaturas muy elevadas; en lo que respecta a la carrocería, evitar el desgaste de la pintura es tan simple como intentar evitar la exposición directa al sol por mucho tiempo y lo mismo corre para el interior. “La pintura es como la piel: cuanto menos esté sometida al rayo del sol, mejor será su salud”, cerraron los especialistas consultados.
Qué partes del auto están en riesgo ante altas temperaturas
- Neumáticos: las pinchaduras son más frecuentes.
- Motor: hay que mantener los niveles del líquido refrigerante y de aceite con periodicidad.
- Batería: se recomienda revisar el estado de batería lo más pronto posible y estar atentos dado que el calor extremo acorta su vida útil.
- Frenos: chequear los líquidos de frenos, pueden evaporarse por las altas temperaturas.
- Carrocería y pintura: el calor desgasta; hay que evitar la exposición directa al sol lo más que se pueda.
Cómo evitar que el calor dañe el auto
Si bien no hay reglas generales, sí existe una serie de consejos que se pueden tener en cuenta.
- Estacionar a la sombra.
- Limpiar el tablero con microfibra.
- Instalar fundas en los asientos de cuero para evitar que se deterioren.
- Lavar el auto con regularidad y encerar para evitar grietas y que el polvo provoque micro rasguños.
- De ser posible, guardar el auto en garages.