Se trata de la séptima generación del muscle car, la última no eléctrica; saldrá a la venta en Estados Unidos en 2023 y contará con varias opciones para ajustarlo al conductor
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Sesenta años después de un debut que lo inmortalizaría en el mundo automotor, Ford presentó la séptima generación de su Mustang. El nuevo modelo mantiene un motor naftero, contracorriente a lo que vienen mostrando otras marcas, y aunque no hay datos oficiales sobre las prestaciones, se sabe que apunta a los 500 CV.
“Invertir en una nueva generación del Mustang es una gran declaración de principios, en una era donde muchos de nuestros competidores se están retirando del negocio de los motores de combustión interna”, dijo el CEO de la compañía, Jim Farley. “Esto no quita que estemos trabajando en un plan de crecimiento ICE (por los vehículos de combustión interna) pero con nuevas tecnologías y opciones híbridas a nuestros autos más rentables y populares en la familia Ford Blue, además de un plan de inversión de US$50.000 millones en el desarrollo de vehículos eléctricos de acá a 2026″, aseguró. De hecho, también se anunció que la próxima camada de Mustangs será eléctrica.
Desde Ford confirmaron que las motorizaciones del nuevo Mustang seguirán siendo las EcoBoost 2.3 turboalimentado de cuatro cilindros, y un Coyote V8 de 5.0 litros. Además, la gama mantiene la opción de transmisión manual estándar de seis velocidades para los clientes que buscan una conexión directa con la potencia del ocho cilindros; así como tiene la opción de una transmisión automática de 10 velocidades que reconfigura casi instantáneamente sus patrones de cambio para que coincidan con el modo de manejo seleccionado.
La configuración del motor de cuarta generación promete, según aseguran desde Ford, entregar la mayor potencia de aspiración natural de cualquier Mustang GT, al contar con una caja de admisión de aire doble y un diseño de doble acelerador que ayuda a minimizar la pérdida por inducción al permitir tasas de flujo de aire más altas.
“Este es el Mustang EcoBoost y GT más atlético e inspirador que se haya manejado”, dijo Ed Krenz, ingeniero jefe de placas de identificación de Ford Mustang. “Ya sea que conduzca una transmisión automática o manual, gracias a los modos de conducción combinados con controles digitales optimizados del motor, la suspensión y la dirección, ahora podemos brindar el máximo rendimiento en todas partes, desde la calle hasta la pista local”.
Por otro lado, la nueva camada de Mustangs cuenta con seis modos de manejo: Normal, Sport, Slippery, Drag, Track más una configuración personalizable con hasta seis perfiles individuales, que el conductor puede ajustar rápidamente, regulando así el esfuerzo de la dirección, la respuesta del motor, la configuración de la transmisión y el control electrónico de estabilidad.
También se agregará la función Remote Rev, para los más fanáticos de los fierros, que permite encender y acelerar el motor en vacío a la distancia solo con la llave, y el Electronic Drift Brake, que sirve para facilitar la práctica del drifting.
En línea con los agregados disponibles para potenciar la experiencia de la conducción, el nuevo Mustang está disponible con la opción del Performance Pack, que agrega una serie de características orientadas a la pista; entre ellas un Tower Brace delantero, diferencial de deslizamiento limitado Torsen y suspensión activa opcional MagneRide, ruedas y neumáticos traseros más anchos y más grandes, y frenos Brembo delanteros de 390 milímetros y traseros de 355 milímetros para un enfriamiento aún mayor.
Además, en la presentación se anticipó el lanzamiento de una nueva versión pensada para la pista, que se va a llamar Dark Horse, y también anunciaron el regreso del Mustang a las 24 Horas de Le Mans, con una preparación especial para la clase GT3 del WEC.
“Mustang es el auto deportivo más vendido del mundo porque hay uno para todos, desde un convertible EcoBoost hasta un cupé fastback GT V8 de 5 litros”, dijo Farley. “Ahora es el momento de que una nueva estampida de propietarios, fanáticos y empleados den la bienvenida al próximo capítulo del legado que será la mejor generación hasta ahora”, agregó.
En lo que concierne a su diseño, que se ofrecerá con carrocería coupé y convertible, es un modelo que de alguna manera vuelve a sus orígenes, con un estilo más bien tradicional. Sí incorporó una nueva parrilla, y se renovaron los paragolpes, las ópticas y las llantas.
En su interior, la compañía asegura que se trata de la cabina de conducción más tecnológicamente avanzada de cualquier Mustang hasta ahora, ya que ofrece al conductor dos pantallas curvas unificadas que se pueden personalizar para mostrar la información que quiere ver.
Fechas y la incógnita de si llegará a la Argentina
El nuevo Mustang, cuyo ensamblaje tendrá lugar en la planta de Flat Rock en Michigan, tiene previsto comenzar sus ventas oficiales en Estados Unidos en 2023.
Por su parte, en la Argentina el deportivo se comercializa con su sexta generación desde octubre de 2016: el Mustang GT por $20 millones, y el Mach 1 por $22 millones; de manera que aunque la puerta no está cerrada, tampoco hay una fecha de llegada con la que se pueda especular, especialmente en este contexto particular para el mercado automotor.
LA NACION