Del mar a las montañas, museos, parajes y autódromos emblemáticos para los fanáticos del automovilismo argentino. Desde la cuna de Juan Manuel Fangio hasta la mítica Ruta 40
Desde el norte del país hasta su punto más austral, pasando por las regiones del centro y rozando la costa, la Argentina despliega un abanico de montañas, lagos, sierras, playas y bosques que definen su topografía. Son los destinos turísticos por excelencia, sobre todo, en vacaciones de verano. No hay que desviarse demasiado de esos espectáculos naturales para descubrir los museos, autódromos y caminos que escribieron (y siguen trazando) la historia del automovilismo nacional. Todos ellos, puntos idílicos para los amantes de este deporte.
Costa argentina
A sólo 64 km de Mar del Plata, Balcarce atrae a los admiradores de su más célebre ciudadano y pentacampeón mundial de la Fórmula 1. El Museo Juan Manuel Fangio es una parada obligada para quienes quieran trasladarse al mundo del Chueco, repasar su carrera y conocer su Negrita y su Flecha de Plata. La Coloradita, de Juan Manuel Bordeu, y El Tractor, de Eduardo Casá, también son parte de la muestra, cuyos modelos clásicos recrean la historia del automovilismo argentino. Los más chicos tienen su propio espacio, El Chuequito, donde pueden aprender sobre la vida de Fangio a través de historietas.
A pocos minutos de allí, en la sierra La Barrosa, el autódromo Juan Manuel Fangio –clausurado tras el accidente fatal de Guido Falaschi– descansa en paz. Lejos del bullicio marplatense, las vistas panorámicas del circuito y los paisajes que lo rodean seducen al viajante. Quienes prefieran la playa podrán optar por el autódromo Luis Rubén Di Palma, en Mar de Ajó, o el kartódromo de Mar Del Plata.
Ciudad y provincia de Buenos Aires
En pleno corazón porteño, y a pocos minutos del Obelisco, el Museo del Automóvil de la Ciudad de Buenos Aires (Irigoyen 2265, Villa Real) relata la evolución de los primeros autos y su inserción en el deporte. Cuenta con espacios dedicados a Fangio y los hermanos Gálvez, y brinda el Curso de Historia del Auto Argentino, con foco en la producción nacional. Otra parada atractiva es el Museo del Automóvil Club Argentino (ACA), en Av. Del Libertador 1850. Como curiosidad, presenta publicidades de autos que datan de 1900 y expone modelos clásicos de 16 marcas; entre ellas, Cadillac, De Dion-Bouton, Panhard-Levassor, Swift y Wanderer. El autódromo de Buenos Aires Oscar y Juan Gálvez, en Av. Gral Paz y Av. Gral. Coronel Roca, es otra visita para tener en cuenta.
En la provincia, La Plata propone un viaje al año 1900 en su Museo del Automóvil y Ramos Generales Colección Rau (cerrado en enero y durante los últimos tres fines de semana de diciembre). El edificio, de 1875, cuenta con un bar al estilo pulpería, autos, motos, juguetes y una radio a kerosene. La capital bonaerense también es sede del autódromo Roberto Mouras, cuyo museo de Turismo Carretera (TC) reúne la coupé Ford de Juan Gálvez, el Dodge de Roberto Mouras, el Trueno Naranja de Carlos Alberto Pairetti y el primer auto de competición que rodó en la Antártida (un Torino), entre otros. La iniciativa fue del presidente de la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) y propietario de la colección, Hugo Mazzacane.
En Olavarría, el Museo Municipal Hermanos Emiliozzi esconde el taller Santuario Tuerca, donde trabajaban dos íconos del TC, Dante y Torcuato Emiliozzi. Alberga, también, la coupé Ford La Galera, con la que los Gringos alcanzaron sus mayores éxitos. El hincha tiene un rincón propio, donde podrá exponer sus recuerdos de los pilotos olavarrienses. La dosis extra de vértigo se encuentra en el autódromo de Olavarría Hermanos Emiliozzi.
Otros museos automovilísticos en la provincia son el Club Primer Auto Argentino Manuel Iglesias, de Campana, y el Museo Roberto José Mouras, en Carlos Casares.
Centro del país
Quienes añoren los eventos deportivos de Fiat de los años ’70 y ’80 podrán viajar al cruce de la Pampa de Achala, en el corazón de las Sierras de Córdoba, donde se corrió el primer Desafío de los valientes. A 10 km de Alta Gracia, una visita interesante es el autódromo Oscar Cabalén, sede de las principales categorías nacionales de automovilismo. Otro destacado es el veloz autódromo Parque Ciudad de Río Cuarto, famoso por su recta de más de 1100 m y su Curva de la Tranquera. Por su parte, el kartódromo de Colonia Caroya, en el norte de la provincia, ofrece un circuito ideal para los amantes del karting.
En Santa Fe, el autódromo Ciudad de Rafaela se jacta de ser uno de los más antiguos del país. De alta velocidad, abrió sus puertas en 1952 con una competición de TC en la que Juan Gálvez se consagró ganador. Otros autódromos santafesinos son el Municipal de Rosario Juan Manuel Fangio, a pocos metros del Río Ludueña, y el Parque de la Velocidad, en San Jorge. La provincia también ostenta el circuito de carreras callejero Gran Premio de Santa Fe.
San Luis luce, desde 2008, tiene el circuito semipermanente Potrero de los Funes. Es, junto con el de Termas de Río Hondo, el único de Grado 2 en la Argentina, calificación que avala la llegada de cualquier categoría mundial, excepto la Fórmula 1. El menú turístico en esta localidad puntana se centra en las actividades que ofrecen sus sierras, valles y arroyos. Cerca de ese paraíso con microclima propio se encuentra el autódromo Rosendo Hernández, uno de los más seguros del país, según la ACTC.
El Norte
Si las altas temperaturas lo permiten, un viaje a Santiago del Estero es la excusa perfecta para visitar el majestuoso autódromo de Termas de Río Hondo. Inaugurado en 2008, fue reconstruido para cumplir con los requisitos de las máximas categorías internacionales y recibir, en 2014, el mundial de motociclismo MotoGP. El autódromo tiene su propio Museo del Automóvil, que expone modelos de Fórmula 1, Sport, TC y motos. Cuenta, también, con el hotel cuatro estrellas Termas Uno, que rinde homenaje a Fangio.
En enero, quienes estén por la zona podrán deleitarse con el Rally Dakar 2017. Los destinos locales de la novena edición sudamericana incluyen Chaco, Tucumán, Jujuy, Salta, La Rioja, San Juan y Córdoba, con cierre en el ACA. Después de presenciar el evento, otros destinos para tachar serán los autódromos Antonio Yaco Guarnieri (Chaco), Eduardo Copello-El Zonda (San Juan) y Martín Miguel de Güemes (Salta). Quien pase por La Linda podrá visitar el Abra del Acay de la Ruta 40, el punto de una ruta nacional más alto del mundo (4895 m sobre el nivel del mar), después de los caminos del Himalaya. Una opción es continuar el trayecto por dicha ruta –atraviesa 11 provincias– hasta llegar a la Patagonia.
La Patagonia
Recrear la carrera de las 1000 Millas entre los paisajes del Sur puede convertirse en la escapada perfecta cuando las temperaturas son amables y la luz solar, abundante. La ruta abarca el Camino de los Siete Lagos, el Circuito Chico y la Comarca Andina del Paralelo 42. Además de las imponentes vistas, un punto de interés para los viajantes fierreros será el autódromo Parque Provincia de Neuquén, en la ciudad de Centenario. Dos autódromos en Río Negro (Parque Ciudad General Roca y Ciudad de Viedma) y otros dos en Chubut (Mar y Valle, en Trelew, y General San Martín, en Comodoro Rivadavia) también merecen una visita.
Cualquiera sea el destino, todos los caminos desembocarán en terrenos fierreros.