Ucrania y HRW trabajarán para que se juzgue a políticos y militares de Rusia
El subdirector de la Oficina del Presidente de Ucrania, Andriy Smirnov, se ha reunido este martes con la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) para reforzar la colaboración frente a la invasión rusa, en particular en los esfuerzos para establecer un tribunal internacional para juzgar a militares y políticos de Rusia.
"Ni el crimen del genocidio ni el crimen contra la humanidad habrían ocurrido si el crimen principal, el delito de agresión, no se hubiese producido", ha remarcado Smirnov. "Desde los primeros días de la escalada del conflicto en febrero de 2022, hemos buscado maneras de dar justicia a la gente que desencadenó el mayor conflicto desde la Segunda Guerra Mundial", ha añadido.
"Hemos estudiado todo los ejemplos históricos de cómo funcionaron los tribunales de Nuremberg y Tokio, así como las capacidades del Tribunal Penal Internacional. Y nos hemos dado cuenta de que la única forma de castigar rápidamente a los altos cargos políticos y militares de Rusia es establecer un tribunal", ha concluido el mandatario ucraniano en un comunicado posterior a la reunión.
A día de hoy, ha recordado Smirnov, hay seis resoluciones de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa que apoyan la creación de un tribunal especial internacional, así como cinco resoluciones del Parlamento Europeo y otras de la OTAN y la Asamblea Parlamentaria de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa.
Tipificar el crimen de agresión
También ha aprovechado para pedir de nuevo que se tipifique el crimen de agresión para los tribunales internacionales: "Desde hace 70 años, nadie en el mundo ha sido juzgado por el crimen de agresión. Rusia llegó a Ucrania mediante la agresión en 2014, y en 2008 atacaron Georgia".
La reivindicación sobre el delito de agresión es algo que Ucrania lleva reclamando desde el inicio de la guerra.
También otras organizaciones de Derechos Humanos, como Amnistía Internacional, han recomendado ratificar este delito como una de las vías necesarias para dar justicia a las víctimas de la invasión de Ucrania.