Tras ayudar a Trump a ganar, Elon Musk mira hacia Europa, alarmando a varios políticos
LONDRES (AP) — Tras invertir su dinero y su energía en ayudar a Donald Trump a reelegirse, Elon Musk ha puesto su mirada en Europa, provocando alarma entre políticos de todo el continente.
El director ejecutivo de Tesla y SpaceX ha respaldado al partido ultraderechista Alternativa para Alemania, ha exigido la liberación de Tommy Robinson, el extremista antiislamista encarcelado en Reino Unido, y ha calificado al primer ministro británico, Keir Starmer, como un malvado tirano que debería estar en prisión.
Muchos políticos europeos han expresado su preocupación por la atención que Musk les ha dedicado. El feed del magnate en su red social X está salpicado de lenguaje abusivo, con el que ha etiquetado a los políticos de “estúpidos cretinos” y “cobardes llorones”, así como de retweets de cuentas de extrema derecha y antiinmigrantes.
Andrew Chadwick, catedrático de comunicación política de la Universidad de Loughborough, dijo que Musk usa X “un poco como un magnate de periódicos al estilo antiguo” para propagar sus puntos de vista políticos.
“Hemos visto cómo Musk ha comenzado a alinearse mucho más claramente con un movimiento internacional de extrema derecha”, dijo Chadwick. “Si observamos a las personas que él mismo impulsa en su plataforma... ha comenzado a reunir a un grupo de distintos influencers de derecha, muchos de ellos con un gran número de seguidores, y a mostrar las pruebas presentadas por ellos como base para sus intervenciones en la política europea”.
Musk se ha insertado en la política en Alemania, donde se celebrará una elección el 23 de febrero, tras el colapso del gobierno de coalición tripartita de centroizquierda del canciller Olaf Scholz.
El 20 de diciembre, Musk escribió en X: “Solo AfD puede salvar a Alemania”, refiriéndose al partido Alternativa para Alemania, a que la agencia de inteligencia local vigila atentamente por su presunto extremismo.
El magnate redobló su apoyo a AfD en un artículo que publicó en el periódico Welt am Sonntag, donde afirmó que Alemania está “al borde del colapso económico y cultural”. Esta semana, Musk tiene previsto realizar un chat en vivo en X con la colíder de AfD, Alice Weidel.
La respuesta de Scholz encarna el dilema al que se enfrentan los políticos europeos: ¿deberían ignorar y dejar pasar los comentarios de Musk, o involucrarse y arriesgarse a amplificarlos?
Scholz dijo que es importante “mantener la calma” ante los ataques personales, pero calificó como preocupante la participación de Musk en la política alemana. En un mensaje de Año Nuevo, Scholz señaló inequívocamente que el camino a seguir de Alemania “no será decidido por los propietarios de canales de redes sociales” sino por los votantes alemanes.
El presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió el lunes sobre los riesgos que supone el poder sin control en manos de multimillonarios de la tecnología y el impacto desestabilizador que podrían tener en las instituciones democráticas.
”¿Quién podría haber imaginado, hace 10 años, que el dueño de una de las mayores redes sociales del mundo intervendría directamente en las elecciones, incluso en Alemania?”, dijo Macron.
El ministro de Salud griego, Adonis Georgiadis, dijo que el comportamiento de Musk era “preocupante y nada divertido”.
“Una persona no puede simplemente usar su plataforma, riqueza y conexiones para tratar de dictar cómo se forman los gobiernos en cada nación”, dijo en Radio Parapolitika. “Esto se vuelve cada vez más peligroso”.
Musk ha centrado cada vez más su atención en la política británica desde que el Partido Laborista, de centroizquierda, fue elegido en julio, calificando a Starmer como un líder “malvado” que preside un “estado policial tiránico”.
Recientemente, Musk se centró en el abuso sexual infantil, particularmente en una serie de casos que sacudieron ciudades del norte de Inglaterra hace varios años, en los que varios grupos de hombres, en su mayoría de origen paquistaní, fueron juzgados por seducir y abusar de docenas de niñas, en su mayoría blancas. Estos casos han sido utilizados por activistas de extrema derecha para vincular el abuso infantil con la inmigración y el islam.
Musk ha acusado a Starmer de no haber llevado a los perpetradores ante la justicia cuando fue director de fiscalías públicas de Inglaterra entre 2008 y 2013, una acusación que Starmer niega rotundamente.
“Starmer debe irse y debe enfrentar cargos por su complicidad en el peor crimen masivo en la historia de Gran Bretaña”, tuiteó Musk.
Chadwick dijo que “la élite política en el Reino Unido ha vacilado para enfrentarse” a los “comentarios increíblemente incendiarios” de Musk. Pero Starmer cambió de táctica el lunes, condenando “las mentiras y la desinformación” y acusando a los políticos conservadores del Reino Unido que han hecho eco de algunas opiniones de Musk de “amplificar lo que dice la extrema derecha”.
“Disfruto el ímpetu de la política, el sólido debate que debemos tener, pero esto debe basarse en hechos y en la verdad, no en mentiras”, dijo el primer ministro.
Starmer enfrenta llamados a endurecer las leyes de Gran Bretaña sobre la interferencia extranjera, y los gobiernos de todo el mundo se han visto presionados para abandonar X. El gobierno del Reino Unido y el de Alemania dicen no tener planes de abandonar la red social.
La red X de Musk es investigada por las autoridades europeas que intentan frenar el odio, la desinformación y otros contenidos tóxicos en las redes sociales. La Unión Europea ha iniciado procesos legales por infracción contra X, según el Acta de Servicios Digitales del bloque, y el portavoz de la Unión Europea, Thomas Regnier, dijo que se examinará si la entrevista en vivo de Musk el jueves con Weidel de AfD otorga un “trato preferencial” inapropiado al partido durante un período preelectoral.
Musk, que se autodenomina defensor de la libertad de expresión, ha criticado los esfuerzos para regular las redes sociales. Ha comparado los intentos británicos de erradicar la desinformación en línea mediante la Ley de Seguridad en Línea con la censura en la Unión Soviética.
Es claro que Musk disfruta al provocar a los políticos convencionales en las redes sociales, pero Chadwick señaló que “queda por ver” si sus publicaciones cambian las actitudes del público o si ayudan a las causas que defiende.
Y las intervenciones políticas conllevan riesgos para él. Sus comentarios son observados de cerca por los inversores de Tesla en busca de señales de que pudiera estar alejando a los compradores de automóviles que no están de acuerdo con su política.
Tesla ya enfrenta dificultades en Europa, donde los nuevos registros de los vehículos eléctricos de Musk cayeron 13% en los primeros nueve meses de 2023, según el investigador automotriz Jato Dynamics. En Alemania, los registros de Tesla cayeron 44%.
Felipe Munoz, analista de alto nivel de Jato, dijo que la franqueza de Musk es rara y arriesgada para el dueño de una empresa pública, aunque, al final, podría resultar rentable.
“Europa se inclina hacia la derecha”, dijo, señalando a políticos como la francesa Marine Le Pen y la primera ministra italiana Giorgia Meloni.
“Veamos lo que pasó en Estados Unidos. Su apuesta por Trump funcionó. Está jugando el mismo juego en Europa”.
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Geir Moulson en Berlín, Sylvie Corbet en París, Raf Casert en Bruselas, Derek Gatopoulos en Atenas, Grecia, y Bernard Condon en Nueva York contribuyeron a este despacho.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
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