Sacerdote cubano se queja por restricción a una procesión de viernes santo
Por Nelson Acosta y Marc Frank
LA HABANA, 29 mar (Reuters) - La Iglesia católica cubana está celebrando un centenar de procesiones en el país para conmemorar el Viernes Santo, dijo un alto cargo de la conferencia episcopal, pero hubo al menos una excepción en La Habana, donde los fieles de una parroquia sufrieron restricciones.
El padre Lester Zayas, párroco del Sagrado Corazón de Jesús, en El Vedado, dijo en una entrevista que el Gobierno le había negado el permiso a su parroquia para realizar el viernes, en las calles de su céntrico distrito, la procesión del Santo Entierro, un ritual de la Semana Santa cristiana.
"Parece absurdo", dijo Zayas, de 45 años, que habitualmente ha destacado en sus misas las dificultades que enfrentan los cubanos por la crisis económica. "El Evangelio no es política", añadió. "No es posible hoy presentar a Jesucristo sin presentar a un pueblo que la está pasando mal", dijo a Reuters antes de la celebración el viernes de la misa, a la que concurrieron unos 150 fieles.
El Gobierno cubano no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre las procesiones en Semana Santa.
La Semana Santa encuentra a Cuba en un momento de tensión debido a la falta de combustible en las termoeléctricas que provoca molestos apagones, lo que se suma a la escasez de medicinas y alimentos, que han provocado algunas protestas, principalmente en Santiago de Cuba y Bayamo, en la zona oriental del país.
El Gobierno cubano ha culpado a las sanciones de larga data de Estados Unidos impuestas a la isla y a "medios de comunicación capitalistas" de los disturbios.
El secretario de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, el padre Ariel Suárez, dijo el jueves a Reuters en una entrevista que "lo que he escuchado del Gobierno es que se han autorizado este año 111 procesiones en todo el país".
Señaló que había escuchado hablar de la situación del padre Zayas en la iglesia del Vedado, la que calificó de "lamentable", y abogó por un "diálogo serio y franco" como vía para solucionar la situación.
En la década de 1960, la Iglesia católica se enfrentó al Gobierno y las festividades religiosas y procesiones fueron prohibidas en Cuba. Con la visita del Papa Juan Pablo II en 1998, las autoridades comunistas dieron luz verde a las fiestas religiosas. Desde entonces se retomaron los ritos de Navidad y Viernes Santo, días que fueron declarados festivos. (Reporte de Nelson Acosta y Marc Frank; contribución de Anett Ríos, Alién Fernández, Mario Fuentes y Carlos Carrillo en La Habana)