Mueren dos palestinos, incluido un médico, durante una redada de las fuerzas de Israel en Yenín
Al menos dos palestinos, entre ellos un médico, han muerto y otros cinco han resultado heridos en el marco de una redada efectuada por las fuerzas de seguridad de Israel a primera hora de este viernes en la localidad cisjordana de Yenín, según han confirmado las autoridades palestinas.
El Ministerio de Sanidad palestino ha señalado en un primer momento en un mensaje en Facebook que la operación se había saldado con un muerto y seis heridos, si bien horas después ha confirmado el fallecimiento del médico Abdulá abu Tin, quien había recibido un disparo en la cabeza.
En su mensaje, ha condenado "enérgicamente" el "crimen israelí" y ha reclamado a la comunidad internacional y las instituciones de Derechos Humanos que "intervengan de inmediato para proteger a los niños del pueblo palestino y a su personal médico y hospitales".
La portavoz del Ministerio de Sanidad palestina, Mai al Kaila, ha denunciado el "terrorismo" israelí y ha acusado a las fuerzas israelíes de "no distinguir entre un palestino y otro". "Todo el mundo está viendo al pueblo palestino siendo asesinado en las calles, en los hospitales y en sus hogares sin moverse y sin interferir", ha lamentado.
A las críticas se ha sumado el portavoz de la Presidencia de la Autoridad palestina, Nabil abu Rudeina, que ha hecho hincapié en que el Gobierno israelí "ha cruzado todas las 'líneas rojas' con su insistencia en su política de asesinatos y ejecuciones sumarias", según ha recogido la agencia palestina de noticias WAFA.
Así, ha indicado que Israel "impone castigos colectivos contra el pueblo palestino" y "continúa sus incursiones en la Mezquita de Al Aqsa". Abu Rudeina ha denunciado "el silencio de la comunidad internacional" y "su incapacidad a la hora de aplicar las resoluciones internacionales, lo que da 'luz verde' a la ocupación israelí para incrementar su agresión y sus crímenes".
De esta forma, ha alertado de que la continuación de esta situación "sumirá a la región en un ciclo de violencia y destrucción" y ha reclamado a Estados Unidos que "intervenga para detener esta locura israelí contra el pueblo palestino (...) antes de que sea demasiado tarde".
Por su parte, el Ejército de Israel ha dicho en una serie de mensajes en su cuenta en Twitter que "la presencia de civiles en zonas de combate suponen un peligro a su vida", antes de agregar que "varios sospechosos armados realizaron disparos y lanzaron artefactos explosivos contra las fuerzas de seguridad". Según el diario 'The Times of Israel', el Ejército israelí investiga si Abu Tin fue alcanzado por disparos palestinos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel ha indicado que "dos sospechosos han sido detenidos", entre ellos Dia Muhamad Yusef Salama, identificado como un miembro del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) activo en un campamento de refugiados en Yenín. "Salama es responsable de varios ataques recientes contra las fuerzas de seguridad israelíes y planeaba llevar a cabo más ataques", ha zanjado.
La redada ha sido llevada a cabo en medio del repunte de las tensiones durante las últimas semanas en Cisjordania, lo que llevó a Israel a poner a finales de septiembre en máxima alerta a las fuerzas de seguridad de cara a la celebración de las próximas festividades judías --el Rosh Hashaná, el Yom Kippur y el Sucot--, mientras que Hamás advirtió sobre las "repercusiones" que tendrían las visitas de fieles judíos a la Explanada de las Mezquitas durante estas fiestas.
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