Molineros de harina enfrentan escasez de suministros mientras productores de trigo conservan sus inventarios
Por Naveen Thukral y Renee Hickman
Singapur/chicago, 21 nov (reuters) - los productores de trigo de varios países exportadores están reacios a vender sus cosechas con los precios cerca de mínimos de cuatro años, afirman comerciantes, agricultores y molineros, lo que deja a los fabricantes de harina con unos suministros cada vez más escasos y vulnerables a un posible repunte de los precios.
Normalmente, los procesadores de cereales compran el trigo con tres o cuatro meses de antelación. Pero los molineros de Asia, incluida Indonesia, el segundo importador mundial de trigo, disponen actualmente de suministros para unos dos meses, y en Oriente Medio, la mayoría de los procesadores de grano sólo tienen suministros para 45 días, según dos molineros y un comerciante.
El limitado suministro de los fabricantes de harina reduce su capacidad de amortiguación frente a cualquier déficit de producción que pudiera desencadenar una subida de los precios mundiales -ya que se prevé que las reservas mundiales alcancen su nivel más bajo en nueve años- y alimentar la inflación alimentaria.
Los agricultores están acaparando sus cosechas debido a que los precios mundiales del trigo se han desplomado a su nivel más bajo desde 2020 ante la sólida producción en Australia y Argentina y a la mejora de las condiciones de crecimiento en las principales regiones exportadoras, incluidos Estados Unidos y la región del mar Negro.
Las ventas de trigo en Australia, el cuarto mayor exportador de trigo del mundo, están funcionando a la mitad del ritmo del año pasado, con 500.000 toneladas contratadas para su envío en noviembre.
Al mismo tiempo, los agricultores de Estados Unidos y partes de la región del mar Negro están almacenando en silos los granos recogidos a principios de año, con la esperanza de que suban los precios, según los agentes del sector.
"Los agricultores no están contentos con el precio que se les ofrece actualmente", dijo un comerciante de cereales de una empresa internacional de Singapur. "La venta de los agricultores es muy lenta y no es sólo en Australia donde se está cosechando, es la misma situación en varios países exportadores".
Los agricultores resisten
En el mercado físico, el trigo del mar Negro con un 12,5% de proteína se ofrece a 265 dólares la tonelada métrica, incluido el coste y el flete (C&F) a Asia, frente a los 275 dólares de hace un par de semanas. El trigo australiano Premium White de nueva cosecha se cotiza a 280 dólares la tonelada C&F, frente a los 290 dólares de hace un par de semanas.
"Los precios han bajado mucho. Y, personalmente, no voy a vender trigo en la situación actual", dijo Cordell Kress, un agricultor de Rockland, en el estado de Idaho, al noroeste de Estados Unidos.
"Si no necesitas dinero de inmediato, lo mejor es almacenarlo o guardarlo y esperar que mejoren los precios o que algún otro problema en Rusia o Australia haga subir los precios aquí".
Además de la falta de oferta por parte de los agricultores, las elevadas tasas de interés han disuadido a los molineros de almacenar trigo, lo que les deja expuestos en caso de que suban los precios.
"La menor cobertura de la oferta nos hace vulnerables, pero con las altas tasas de interés no tiene sentido mantener grandes reservas", afirmó un responsable de compras de una harinera de Oriente Medio con sede en Dubái.
Incluso con una sólida producción en el hemisferio sur, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos prevé que las reservas mundiales de trigo se reduzcan a su nivel más bajo en nueve años a mediados del próximo año.
"Las cosechas de trigo del hemisferio norte todavía tienen que pasar por etapas cruciales de desarrollo, cualquier problema con el clima hasta la cosecha en julio puede desencadenar un repunte de los precios, dado lo ajustado de los inventarios", dijo Ole Houe, director de servicios de asesoramiento de IKON Commodities en Sídney.
En un ligero respiro para los molineros, las altas tasas de interés han impulsado a los agricultores rusos, que habían estado reteniendo sus cosechas, a cambiar de táctica y venderlas para poder depositar dinero en los bancos.
Pero Rusia, principal exportador de trigo, podría estar quedándose sin suministros. La cuota de exportación de grano de Moscú, vigente de febrero a junio, podría ser casi tres veces menor que los 29 millones de toneladas del año anterior.
(Reporte de Naveen Thukral en Singapur y Renee Hickman en Chicago; reporte adicional de Peter Hobson en Canberra; Editado en Español por Ricardo Figueroa)