Guerra en Gaza: al menos 30 muertos en un ataque a una escuela de la ONU que según Israel era una “base de Hamas”
El ejército israelí afirmó que había “terroristas” operando en el edificio, mientras que el hospital que recibió a los muertos dijo que había mujeres y niños
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DEIR AL-BALAH, Franja de Gaza.- Al menos 30 personas murieron en un ataque israelí que tuvo lugar durante la madrugada del jueves contra una escuela de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa) que acogía a palestinos desplazados en el centro de Gaza. Según funcionarios locales de salud, entre las víctimas se registraron nueve mujeres y 14 niños. El Ejército israelí reivindicó el ataque y dijo que el edificio funcionaba como “una base de Hamas”.
“Aviones de combate del ejército (...) realizaron un ataque preciso sobre una base de Hamas situada en el interior de una escuela de la Unrwa en la zona de Nuseirat”, dijo el ejército israelí, que informó de “varios terroristas muertos”.
“Terroristas de Hamas y de la Jihad Islámica (...) que habían participado en el ataque mortífero contra las comunidades del sur de Israel el 7 de octubre operaban en este recinto”, afirmó.
🔴Eliminated: several Hamas and Islamic Jihad terrorists who embedded themselves inside of an @UNRWA school.
— Israel Defense Forces (@IDF) June 6, 2024
IAF fighter jets conducted a precise strike on a Hamas compound embedded inside the school in the area of Nuseirat. These terrorists belonged to the Nukhba Forces and… pic.twitter.com/2AX28twfVs
El hospital Mártires de Al Aqsa, en la ciudad cercana de Deir al Balah, indicó que recibió “37 mártires” del ataque contra la escuela de la ONU, al ofrecer un nuevo balance tras la cifra previa de 27 muertos divulgada por la oficina de prensa de Hamas. Según sus registros, entre los muertos hay por lo menos 14 niños y nueve mujeres.
Las autoridades del hospital también señalaron que la “avería de uno de sus generadores eléctricos” complicaba el tratamiento de pacientes vulnerables y podía provocar “una catástrofe humanitaria”.
El director de la Unrwa, Philippe Lazzarini, afirmó este jueves que Israel lanzó el bombardeo “sin previo aviso”. “Otra escuela de la UNRWA convertida en refugio atacada”, escribió Lazzarini en la red social X en un mensaje en el que añadió que la agencia había comunicado a las fuerzas israelíes las coordinadas del edificio. “Otro día horrible en Gaza”, dijo.
Another horrific day in #Gaza.
— Philippe Lazzarini (@UNLazzarini) June 6, 2024
Another @UNRWA school turned shelter attacked.
This time in Nuseirat, in the Middle Areas, hit overnight by the Israeli Forces without prior warning to the displaced or @UNRWA.
At least 35 people were killed and many more injured.
The school… pic.twitter.com/VL5XWWhmYd
Otro ataque contra una casa durante la noche mató a seis personas. Los dos episodios ocurrieron en Nuseirat, uno de los campos de refugiados urbanizados en Gaza que se remontan a la guerra de 1948 en torno a la creación de Israel, cuando cientos de miles de palestinos huyeron o fueron expulsados de sus hogares.
El hecho se produjo después de que el Ejército anunciara una nueva campaña aérea y terrestre en varios campos de refugiados en el centro de Gaza para perseguir a milicianos de Hamas que, según dice, se han reagrupado allí. Es una nueva incursión de tropas en zonas de la Franja de Gaza que ya habían invadido, lo que subraya la resiliencia del grupo armado pese a los casi ocho meses de campaña israelí en el territorio.
Escenas caóticas
El ataque golpeó la escuela Al-Sardi, gestionada por la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, conocida por el acrónimo Unrwa. La escuela estaba llena de palestinos que habían huido de ofensivas y bombardeos israelíes en el norte de Gaza, indicaron.
Ayman Rashed, un hombre que se había visto desplazado de Ciudad de Gaza, dijo que los misiles golpearon las salas en el segundo y tercer piso, donde se refugiaban familias, y que había ayudado a sacar cinco muertos, incluidos un anciano y dos niños, uno con la cabeza abierta. “Estaba oscuro, sin electricidad y nos costó sacar a las víctimas”, afirmó Rashed.
Mohammed al-Kareem, un palestino desplazado que se refugiaba cerca del hospital, describió escenas caóticas fuera del recinto. Dijo que habían llegado un vehículo tras otro mientras personas angustiadas llevaban a los heridos a la unidad de urgencias. En internet circulaban videos que parecían mostrar a varios heridos a los que se atendía en el suelo del hospital, una escena habitual en los sobrepasados centros médicos de Gaza.
Las imágenes mostraban cuerpos envueltos en mantas o bolsas de plástico alineados en el patio del hospital, que estaba oscuro en su mayor parte porque el personal intentaba ahorrar el combustible limitado para electricidad. Al-Kareem aseguró que había visto gente buscando a sus seres queridos entre los cuerpos y que una mujer no dejaba de pedir a los trabajadores médicos que abrieran las mortajas para ver si su hijo estaba dentro. “La situación es trágica”, declaró.
El Ejército israelí dijo que Hamas había insertado un “complejo” dentro de la escuela y que milicianos lo utilizaban como refugio mientras planeaban ataques a tropas israelíes, aunque en un primer momento no ofreció pruebas. Publicó una foto de la escuela y señaló las aulas del segundo y tercer piso. Ante este marco las fuerzas israelíes dijeron haber tomado medidas previas “para reducir el riesgo de dañar a civiles no involucrados durante el ataque, incluido efectuar vigilancia aérea, e información adicional de inteligencia”.
La Unrwa, que coordina casi toda la ayuda para Gaza, estuvo en el centro de una tormenta diplomática y al borde del colapso luego de que Israel acusara en enero a una docena de sus 13.000 empleados en Gaza de estar implicados en el ataque de Hamás del 7 de octubre, que desató la actual guerra. Ello llevó a numerosos países, incluido Estados Unidos, su principal fuente de recursos, a suspender el financiamiento de la agencia, amenazando el suministro de ayuda a Gaza. Varios países retomaron posteriormente el financiamiento.
Las escuelas de la Unrwa en toda Gaza han operado como refugios desde que comenzó la guerra, que ha obligado a desplazarse a la mayor parte de los 2,3 millones de palestinos que habitan el territorio.
Israel emprendió su campaña tras el ataque de Hamas del 7 de octubre, en el que milicianos mataron a unas 1200 personas y tomaron como rehenes a otras 250. La respuesta militar israelí ha matado al menos a 36.000 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza, que en sus cifras no indica cuántos corresponden a civiles y cuántos a combatientes.
Meses en guerra
El sistema de salud de Gaza prácticamente se ha derrumbado durante casi ocho meses de guerra. El hospital, que atendía a unos 700 heridos y enfermos antes de los últimos ataques, dijo el miércoles que uno de sus dos generadores eléctricos había dejado de funcionar, lo que amenazaba su capacidad de seguir operando los respiradores y las incubadoras para bebés prematuros.
Israel bombardea de forma rutinaria todas las zonas de Gaza desde que comenzó la guerra y ha realizado grandes operaciones terrestres en las dos mayores ciudades, Ciudad de Gaza y Jan Yunis. Las tropas realizaron otra ofensiva este año durante varias semanas en Bureij y otros campos de refugiados cercanos en el centro de Gaza.
Asimismo envió tropas a Rafah en mayo en lo que describió como una incursión limitada, pero ahora esas fuerzas operan en zonas céntricas de la ciudad más meridional de Gaza. Más de un millón de personas han huido de Rafah desde el inicio de la operación, y muchas de ellas se han dirigido al centro de Gaza.
Agencias AP y AFP
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