Líderes de hezbolá renuncian a tregua en gaza como condición para el alto el fuego en líbano
BEIRUT, 8 oct (Reuters) - Los líderes de Hezbolá ya no exigen una tregua en Gaza como condición para alcanzar un alto el fuego en el Líbano, dando marcha atrás a una promesa reiterada de seguir luchando hasta que Israel detenga su ofensiva contra su aliado Hamás.
Desde que Hezbolá comenzó a lanzar misiles a través de la frontera libanesa un día después del asalto de Hamás a Israel del 7 de octubre de 2023, los responsables del grupo han dicho sistemáticamente que no se detendrían hasta que el Estado judío pusiera fin a la guerra en Gaza.
Pero Naim Qassem rompió esa retórica en un discurso televisado el martes, aunque prometió seguir al lado de Hamás y los palestinos en su batalla contra Israel.
Qassem, ahora máximo responsable de Hezbolá tras la muerte de su jefe, Sayyed Hasán Nasralá, en un ataque israelí, dijo que respalda los esfuerzos del presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, aliado del grupo, para conseguir una tregua, sin establecer ninguna condición previa.
"Apoyamos la actividad política dirigida por Berri bajo el título de alto el fuego", declaró Qassem. "Si el enemigo (Israel) continúa su guerra, entonces el campo de batalla decidirá".
Dos días antes, dos funcionarios de menor rango de Hezbolá también habían hablado de una tregua en el Líbano sin establecer un vínculo con Gaza.
Hezbolá no ha dicho explícitamente que esté cambiando de postura. El grupo no hizo comentarios para este artículo.
Sami Abu Zuhri, alto cargo de Hamás, dijo a Reuters que su grupo seguía "confiando en la postura de Hezbolá de vincular cualquier acuerdo con el cese de la guerra en Gaza", citando declaraciones anteriores de Hezbolá.
Sin embargo, un funcionario del Gobierno libanés que no quiso dar su nombre dijo a Reuters que Hezbolá había modificado su postura debido a una serie de presiones, entre ellas el desplazamiento masivo de personas de los principales distritos donde viven los partidarios del grupo chií musulmán en el sur de Líbano y los suburbios del sur de Beirut.
El funcionario dijo que también se debía a la intensificación de la campaña terrestre de Israel y a las objeciones a la postura de Hezbolá por parte de algunos actores políticos libaneses.
En los últimos días, varios legisladores han pedido una resolución para poner fin a los combates que no vincule el futuro del Líbano -una nación que ya estaba paralizada por una crisis económica antes del último conflicto- a la guerra de Gaza.
"No vincularemos nuestro destino al de Gaza", declaró el lunes el veterano druso libanés Walid Jumblatt.
El político cristiano libanés Suleiman Frangieh, estrecho aliado de Hezbolá, declaró el lunes a la prensa que la "prioridad" es detener la ofensiva israelí "y que salgamos unidos de este ataque y que Líbano salga victorioso".
Antes de estos comentarios, hubo indicios por parte de otros dos funcionarios de que Hezbolá podría estar cambiando de postura.
Mahmoud Qmati declaró el domingo a la televisión estatal iraquí que el grupo estaría "dispuesto a empezar a examinar soluciones políticas tras el cese de la agresión a Líbano", de nuevo sin mencionar Gaza.
Diplomáticos que también tomaron nota del cambio de postura afirmaron que Hezbolá podría haber llegado demasiado tarde para generar un impulso diplomático. Israel intensificó el martes su ofensiva con el envío de tropas terrestres a más sectores de la frontera libanesa-israelí y prosigue los ataques aéreos sobre Beirut y otros lugares.
(Reporte de Maya Gebeily y Timour Azhari; información adicional de Nidal Al-Mughrabi. Editado en español por Javier Leira)