Líbano evalúa los daños tras ataques israelíes contra una institución financiera de Hezbollah
Beirut (ap) —
Los libaneses evaluaban los daños el lunes tras ataques israelíes durante noche contra una docena de sucursales de una institución financiera gestionada por Hezbollah que según Israel se utilizaba parra financiar ataques, pero donde mucha gente corriente tenía sus ahorros.
Los ataques golpearon oficinas de Al-Qard Al-Hassan en los vecindarios sureños de Beirut, diferentes lugares del sur de Líbano y el valle oriental de Bekaa, donde Hezbollah tiene una fuerte presencia. Un bombardeo destruyó un edificio de nueve plantas que albergaba una oficina. El lunes aún salía humo de varios lugares mientras las topadoras retiraban escombros.
El Ejército israelí había emitido avisos de evacuación antes de los ataques y no había reportes de víctimas.
Israel invadió Líbano este mes y dijo que pretendía alejar a Hezbollah de la frontera tras más de un año de fuego de cohetes, misiles y drones iniciado después de que la milicia palestina Hamás lanzara un ataque sorpresa a Israel desde al Franja de Gaza el 7 de octubre de 2023. Los bombardeos israelíes han golpeado gran parte de Líbano durante semanas y obligado a más de un millón de personas a huir de sus casas.
Avichay Adraee, vocero en árabe del ejército israelí, dijo que los aviones de combate habían atacado varios lugares “utilizados para guardar dinero para la rama militar de Hezbollah”, lo que incluía Al-Qard Al-Hassan, que según dijo financia compras de armas y es utilizado para pagar a combatientes de Hezbollah.
Añadió que Hezbollah almacena cientos de millones de dólares en las oficinas, sin presentar pruebas, y que los ataques iban dirigidos a impedir que el grupo se rearmara.
En una serie de tuits el domingo por la noche, el Ejército israelí publicó mapas con la ubicación de las oficinas que pensaba atacar y pidió a los residentes cercanos que evacuaran. Miles de personas huyeron y atascaron las calles en la capital.
Televisoras locales sirias intentaron llamar a la calma e indicaron que el centro de Beirut no estaban en la lista de objetivos, después de que un mapa publicado por el Ejército israelí indicara que atacaría un lujoso centro comercial designado erróneamente como un lugar donde había una sucursal. El Ejército israelí no atacó el lugar.
La entidad, que tiene más de 30 oficinas en todo Líbano, intentó tranquilizar a sus clientes y dijo que había evacuado todas sus sucursales y trasladado el oro y otros depósitos a zonas seguras.
Esa agrupación registrada como sin fines de lucro, sancionada tanto por Estados Unidos como por Arabia Saudí, sirve desde hace mucho como alternativa a los bancos libaneses, que han impuesto restricciones ante la grave crisis financiera iniciada en 2019.
Su nombre en árabe significa “préstamo benevolente”, y Hezbollah lo ha utilizado para consolidar su apoyo entre la población chií en un país donde el Estado y las instituciones financieras han fracasado en los últimos años. Aun así, muchos de sus clientes son civiles no asociados a Hezbollah.
Israel anunció los ataques un día después que el Secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, calificara las bajas civiles en el Líbano como “demasiado altas” en la guerra entre Israel y Hezbollah, e instó a Israel a reducir algunos ataques, especialmente en Beirut y sus alrededores.