La UE cumple el último trámite para frenar distorsiones del mercado por inversores terceros como China
La Unión Europea ha cumplido este lunes el último trámite para aplicar nuevas normas que permitan a Bruselas investigar subsidios de inversores extranjeros que puedan poner en riesgo la libre competencia dentro del Mercado Interior, en especial en el contexto de grandes fusiones o de licitaciones públicas; una medida pensada sobre todo para frenar la entrada de China en sectores estratégicos en la UE.
Con el visto bueno de los 27 al nuevo reglamento ya validado por la Eurocámara, la Comisión Europea obtiene poderes para iniciar investigaciones sobre subvenciones concedidas por autoridades públicas extracomunitarias a empresas activas en la UE, con el objetivo de cubrir el vacío legal que se creaba porque no podía aplicar el mismo escrutinio de las inversiones europeas a las realizadas por terceros.
"La UE es la mayor economía del mundo. Las nuevas medidas facultarán a la UE para investigar y prevenir las prácticas desleales apoyadas por países que no son miembros de la Unión, lo que le permitirá garantizar una competencia leal y condiciones justas para todas las empresas", ha razonado el ministro de Industria y Comercio de República Checa, Josef Síkela, cuyo país ocupa este semestre la presidencia de turno de la UE.
Las principales novedades del nuevo reglamento tienen que ver con la creación de dos instrumentos de notificación previa para las fusiones de gran envergadura y para las ofertas en procedimientos de investigación pública relevantes.
También se creará una herramienta general de investigación de mercado para investigar las restantes situaciones de mercado, así como las fusiones y los procedimientos de contratación pública de menor valor.
De este modo, las compañías deberán notificar a los servicios comunitarios las fusiones y adquisiciones cuando una de las partes implicadas tenga un volumen de negocios en la UE de al menos 500 millones de euros y haya una contribución financiera extranjera de al menos 50 millones de euros.
En el caso de las ofertas en los procedimientos de contratación pública, el umbral para la contratación pública se fija en al menos 250 millones de euros. Si una empresa incumple las normas de notificación, la Comisión podrá imponer multas y examinar la operación como si hubiera sido notificada.
Además, salvo precisas excepciones, la Comisión estará facultada para investigar las subvenciones extranjeras concedidas hasta cinco años antes de la entrada en vigor del reglamento cuando dichas subvenciones distorsionen el Mercado Interior tras la entrada en vigor de la nueva norma.
Así, como ya ocurre con las reglas en materia de ayudas de Estado dentro de la UE, si Bruselas determina la existencia de una subvención extranjera y que distorsiona la competencia, realizará una prueba para valorar los efectos positivos y negativos de una subvención extranjera.
Si los efectos negativos son mayores que los positivos, la Comisión estará facultada para imponer medidas correctoras, tanto estructurales como no estructurales, y el reembolso de la subvención extranjera, o para aceptar compromisos de las empresas afectadas con el fin de corregir la distorsión causada por la subvención extranjera.