La oposición increpa a Ramaphosa en la Asamblea Nacional de Sudáfrica por la polémica del robo en su granja
El debate en la Asamblea Nacional de Sudáfrica sobre el presupuesto estatal se ha visto eclipsado este jueves en numerosas ocasiones por las acusaciones de la oposición contra el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, quien está envuelto en un escándalo sobre su granja de Limpopo.
Después de numerosas intermisiones por parte de los parlamentarios del opositor Luchadores de la Libertad Económica (EFF) así como de llamadas al orden reiteradas de la presidenta de la Asamblea Nacional, Nosiviwe Mapisa-Nqakulam, Ramaphosa ha subido al estrado para defenderse de las acusaciones.
El ex jefe de la agencia de seguridad del Estado, Arthur Fraser, presentó el miércoles cargos penales contra Ramaphosa en la comisaría de Rosebank por complicidad en un robo en su granja de Limpopo. De hecho, el propio mandatario confirmó que el 9 de febrero de 2020, o alrededor de esa fecha, se produjo un robo en su granja en el que se sustrajo producto de caza.
Fraser subrayó en su denuncia que las acusaciones se deben al "robo de millones de dólares, más de 3,7 millones de euros (4 millones de dólares) ocultos en las instalaciones de la granja" del presidente del país.
Antes de pronunciar su discurso, los parlamentarios de EFF, así como su líder, Julius Malema, se han declarado en huelga, por lo que se ha provocado un gran alboroto en la sala, mientras Ramaphosa estaba, por su parte, sentado en silencio, según ha informado el diario sudafricano 'Sowetan'.
"El mayor perjuicio que podemos hacerle a nuestra gente en la vida de nuestra nación es distraernos de la tarea que tenemos entre manos", ha defendido el mandatario sudafricano, refiriéndose a los desafíos que enfrenta el país, como una "pandemia devastadora", así como la pobreza, el desempleo y el subdesarrollo.
Ramaphosa ha hecho hincapié, durante su intervención, en el coste de los disturbios de julio, que dejaron más de 350 muertos y varias jornadas de violencia, destrucción y saqueos en las provincias de KwaZulu-Natal y Gauteng.
Por otro lado, también se ha referido al "impacto humano y económico" de las inundaciones, por las que se tuvo que decretar en abril el desastre nacional tras registrarse al menos 450 muertos y cerca de 4.000 viviendas destruidas.
Asimismo, ha prometido, durante su intervención en la Asamblea Nacional, que su gobierno no se detendrá en frenar la corrupción, pese a la denuncia de Fraser y los reproches de los miembros de la oposición.
"La lucha contra la corrupción continúa a buen ritmo, y la red se está cerrando sobre aquellos que, durante años, 'engordaron' con el dinero y los recursos del pueblo sudafricano", ha dicho el mandatario sudafricano, tal y como ha recogido el portal de noticias News24.
Por su parte, el líder de Alianza Democrática, John Steenhuisen, ha sido uno de los muchos líderes de la oposición que le ha preguntado a Ramaphosa sobre el robo de dinero en efectivo de su granja de ganado.
"No más subterfugios, no más secretos. Solo respuestas directas a estas preguntas, y con mucho gusto le enviaré el texto de este discurso para que las tenga todas registradas. ¿Cuánto dinero se escondió en Phala Phala en el momento del robo y en qué moneda? ¿Cuánto se robó realmente?", ha preguntado, según recoge el citado medio.
La Presidencia de Sudáfrica aseguró en su momento que el presidente no estaba involucrado "en ninguna conducta delictiva", por lo que el mandatario prometió, "una vez más", su "plena cooperación con cualquier investigación policial".
Asimismo, Ramaphosa ya dijo el domingo, según han recogido distintos medios locales sudafricanos, que partidarios de la "política sucia" estaban detrás de dichas acusaciones con respecto a su posible implicación en el robo de su granja.