La Agencia Sanitaria de Brasil exige a Bolsonaro que se retracte por insinuar "intereses" en la vacunación
El director-presidente de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), Antonio Barra Torres, ha exigido este sábado al presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que se retracte por sus recientes declaraciones en las que insinuaba "intereses" por parte de la agencia en el proceso de vacunación del coronavirus en niños.
"Si tiene información que levante el menor indicio de corrupción sobre este brasileño, no pierda el tiempo ni prevarique, señor presidente. Determine una investigación policial inmediata sobre mí, de hecho, sobre cualquiera que trabaje a día de hoy en Anvisa, donde con orgullo tengo el privilegio de integrarme", ha señalado Barra Torres en un comunicado.
Así, el presidente de Anvisa ha añadido que en caso de que Bolsonaro no cuente con información sobre este asunto, "se retracte". "Estamos luchando contra el mismo enemigo y todavía hay mucha guerra por delante", ha añadido Barra Torres, animando al presidente a cooperar en la lucha contra la pandemia.
Bolsonaro ha cargado este jueves contra el proceso de vacunación del coronavirus en los niños porque considera que su posibilidad de morir a cuenta del virus es "casi nula", y ha acusado a Anvisa de ser "fanáticos de la vacunación".
Además ha puesto en duda "cuál es el interés de Anvisa" con sus procesos de inmunización en el sector más joven de la sociedad, ante lo que la Sociedad Brasileña de Pediatría ya defendió que "ninguna enfermedad (...) ha victimizado a tantos niños como la COVID-19", según recoge el portal de noticias brasileño G1.
El Ministerio de Salud brasileño ha notificado más de 300 fallecimientos de niños entre cinco y once años desde el inicio de la pandemia. Las cifras generales apuntan a más de 22,3 millones de infecciones y 620.000 decesos a cuenta de la enfermedad.
Estas no son las primeras declaraciones del mandatario brasileño en contra de las vacunas contra la COVID-19, e incluso el Tribunal Supremo le ha abierto una investigación por vincularlas con el sida.
Además, Bolsonaro ha sido también investigado por una comisión parlamentaria sobre su gestión durante la crisis sanitaria que apuntó a la prohibición del uso de las redes sociales para dejar de difundir noticias falsas.
Además, acusó a Bolsonaro de nueve delitos, entre ellos el de lesa humanidad, prevaricación, empleo irregular de fondos públicos y charlatanería, figura que recoge el Código Penal para castigar a quienes promocionen remedios secretos contra enfermedades.