Joseph anuncia la reapertura del aeropuerto de la capital y la Policía confirma al menos 6 arrestos
La Policía busca a autores intelectuales y encargados de seguridad de Moise son llamados por la Justicia
MADRID, 9 Jul. 2021 (Europa Press) -
El primer ministro de Haití, Claude Joseph, ha anunciado este jueves la reapertura del aeropuerto internacional en Puerto Príncipe, que suspendió su actividad tras el asesinato del presidente, Jovenel Moise, mientras que la Policía ha informado de la detención de al menos seis personas relacionada con el magnicidio.
En una rueda de prensa ofrecida desde la capital, Puerto Príncipe, Joseph también ha indicado que la primera dama, Martine Moise, se encuentra "estable" en un hospital de Estados Unidos, tras resultar herida en el ataque que la madrugada del miércoles acabó con la vida del mandatario.
En su discurso, Joseph también ha anunciado que "queda reactivada la actividad económica" y ha hecho un llamamiento "a la población a acudir a trabajar", ya que las fuerzas policiales garantizarán "la estabilidad y seguridad de la nación".
Por su parte, la enviada especial de Naciones Unidas en Haití, Helen La Lime, ha confirmado que seis sospechosos del asesinato han sido rodeados por la seguridad en la capital, mientras que "un grupo mayor de posibles autores se ha refugiado en dos edificios de la ciudad, y ahora están rodeados por la Policía", ha contado, informa DPA.
En esta línea, la Policía haitiana ha pedido a la población que los ayuden a "esclarecer el crimen", por lo que ha pedido que se comparta cualquier información disponible. Asimismo, también ha solicitado ayuda internacional en la investigación, a la que está respondiendo Estados Unidos, según ha confirmado el portavoz del Departamento del país norteamericano, Ned Price.
"Somos conscientes de la solicitud de asistencia de investigación de la Policía Nacional de Haití, y Estados Unidos está respondiendo (...) La situación sobre el terreno está evolucionando rápidamente y nos hemos mantenido en contacto regular con funcionarios haitianos, incluidas las autoridades de investigación, para discutir cómo Estados Unidos puede ayudar en el futuro", ha dicho Price en rueda de prensa.
El secretario de Estado de Comunicación de Haití, Frantz Exantus, ha confirmado, en su cuenta de Twitter, que cuatro de los sospechosos han muerto --tres de ellos extranjeros--, mientras que dos han resultado heridos y otros seis han sido arrestados. Exantus ha indicado que en las próximas horas se presentará de forma pública al grupo de arrestados.
Entre los detenidos, uno de ellos ha sido identificado como estadounidense, según ha indicado el ministro de Elecciones, Mathias Pierre, a la CNN. Este ha sido identificado como James Solages.
El jefe de la Policía de Haití, León Charles, ha indicado que "ya se tienen a los autores físicos del asesinato, y que ahora buscan identificar a los autores intelectuales". En este sentido, ha anunciado el inicio de una investigación administrativa y judicial sobre el magnicidio.
"La inspección general entrevistará a los agentes que se encontraban en el lugar y la Policía Judicial se encargará de otra investigación", ha dicho según recoge 'Le Nouvelliste'.
Por otro lado, el comisionado de Gobierno del Tribunal de primera instancia de Puerto Príncipe, Me Bedford Claude, ha pedido al inspector general jefe, Frantz Jean François, que ponga a altos funcionarios y agentes de seguridad del presidente Jovenel Moise a disposición de la Justicia, según recoge 'Juno 7'.
Por su parte, el primer ministro interino ha compartido a la BBC que Moise pudo haber sido asesinado porque estaba luchando contra los "oligarcas" en Haití. "Moise estaba luchando contra algunos oligarcas en el país y no sabemos si existe un vínculo entre esos oligarcas y los asesinos extranjeros del presidente", ha dicho.
Moise fue asesinado en un ataque perpetrado el miércoles de madrugada contra su residencia privada, recibiendo hasta 12 disparos. Las autoridades haitianas han atribuido el ataque a "un grupo de individuos no identificados" del que nada se sabe, más allá de que hablaban español e inglés. Posteriormente, el embajador del país caribeño en Estados Unidos, Bocchit Edmond, ha asegurado que los asaltantes estaban "muy bien entrenados" y que se hicieron pasar por agentes de la DEA. Tras el magnicidio, Joseph declaró el estado de sitio.