jefe del ejército es elegido presidente en líbano, en una señal de cambios regionales

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BEIRUT, 9 ene (Reuters) - El Parlamento libanés eligió el jueves al jefe del Ejército, Joseph Aoun, como jefe de Estado, dando así la presidencia vacante a un general que cuenta con el beneplácito de Estados Unidos y mostrando la menor influencia del grupo Hezbolá, apoyado por Irán, tras su devastadora guerra con Israel.

El resultado refleja los cambios en el equilibrio de poder en Líbano y Oriente Medio en general, con el grupo musulmán chií Hezbolá gravemente golpeado por la guerra del año pasado y su aliado sirio Bashar al Asad derrocado en diciembre.

También indica un resurgimiento de la influencia saudí en un país donde el papel de Riad fue eclipsado por Irán y Hezbolá hace mucho tiempo.

La presidencia, reservada a un cristiano maronita en el sectario sistema de reparto de poder libanés, ha estado vacante desde que Michel Aoun terminó su mandato en octubre de 2022, con facciones profundamente divididas incapaces de ponerse de acuerdo sobre un candidato capaz de obtener suficientes votos en el Parlamento de 128 escaños. Aoun no alcanzó los 86 votos necesarios en la primera vuelta, pero superó el umbral con 99 votos en la segunda, según el presidente del Parlamento, Nabih Berri, después de que legisladores de Hezbolá y de su aliado chií el Movimiento Amal le apoyaron.

Según tres fuentes políticas libanesas, Aoun recibió el apoyo de Suleiman Frangieh, el candidato preferido de Hezbolá, que se retiró y declaró su apoyo al comandante del Ejército, y de enviados franceses y saudíes que se desplazaron por Beirut para pedir su elección en reuniones con políticos.

Una fuente cercana a la corte real saudí afirmó que enviados franceses, saudíes y estadounidenses habían comunicado a Berri, estrecho aliado de Hezbolá, que la ayuda financiera internacional -incluida la de Arabia Saudita- dependía de la elección de Aoun.

"Hay un mensaje muy claro de la comunidad internacional de que están dispuestos a apoyar al Líbano, pero que necesita un presidente, un gobierno", dijo a Reuters Michel Mouawad, un legislador cristiano opuesto a Hezbolá que votó por Aoun, antes de la votación. "Recibimos un mensaje de apoyo de Arabia Saudita", añadió.

La elección de Aoun es un primer paso hacia la reactivación de las instituciones gubernamentales en un país que no ha tenido ni jefe de Estado ni un gabinete con plenos poderes desde que Aoun dejó el cargo.

Líbano, cuya economía aún se tambalea tras el devastador colapso financiero de 2019, necesita urgentemente ayuda internacional para reconstruirse tras la guerra, que según el Banco Mundial costó al país 8.500 millones de dólares.

El sistema de gobierno de Líbano exige que el nuevo presidente convoque consultas con los legisladores para nombrar a un primer ministro musulmán suní que forme un nuevo gabinete, un proceso que a menudo puede prolongarse mientras las facciones regatean por las carteras ministeriales.

Aoun desempeña un papel clave en el alto el fuego entre Hezbolá e Israel, negociado por Washington y París en noviembre. Los términos exigen que el Ejército libanés se despliegue en el sur del Líbano a medida que las tropas israelíes y Hezbolá retiran fuerzas.

Aoun, de 60 años, ha sido comandante del Ejército libanés respaldado por Estados Unidos desde 2017. Bajo su mandato, la ayuda estadounidense siguió fluyendo al Ejército, parte de una política estadounidense de larga data centrada en apoyar a las instituciones estatales para frenar la influencia de Hezbolá. (Reporte de Laila Bassam, Timour Azhari, Maya Gebeily en Beirut, y Pesha Magid en Riad; redacción de Tom Perry, edición de Gareth Jones y William Maclean. Edición en español de Mireia Merino y Natalia Ramos)

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