El presidente de Guatemala insta a reformar el Consejo de Seguridad y la propia ONU
El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, ha hecho un llamamiento este martes en la Asamblea General de la ONU para llevar a cabo una reforma del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y de la propia ONU para retomar "el camino perdido" tras su fundación en 1945.
Giammattei ha instado a la comunidad de Estados miembros a avanzar en una propuesta que defina "reformas de fondo" de la ONU para que retome sus principios fundacionales, según ha expresado durante su intervención.
Asimismo, ha reiterado al Consejo de Seguridad que "honre su responsabilidad" y haga "cambios profundos urgentes" para asegurar el respeto de la soberanía, sin sesgos ideológicos y sin que haya países que puedan vetar resoluciones.
También ha subrayado la importancia de que Naciones Unidas tenga un papel más activo en preservar la posibilidad de una tercera guerra mundial, por lo que ha asegurado que deberían modificarse sus bases para tener mecanismos "que le permitan responder a los desafíos de la humanidad, tan necesitada de paz y desarrollo".
"A nivel global, se nos presentan nuevas crisis y muchas de ellas son causadas por la voluntad humana, por irrespeto a la soberanía. Recordemos que ningún país, organización o entidad multilateral puede ni debe intervenir en los asuntos internos de otros países", ha sostenido el mandatario guatemalteco.
"La ONU, como guardiana del Derecho Internacional y centro de diálogo para el mantenimiento de la paz y seguridad de los Estados, no podrá resolver los problemas mundiales si no existe el compromiso de nosotros, los representantes de los Estados para respetar el Derecho Internacional y resolver nuestras diferencias de manera pacífica", ha agregado.
Por este motivo, ha insistido en el cesa de la guerra de Ucrania y de las amenazas "contra la soberanía de Taiwán e Israel".
Con todo, el mandatario de Guatemala ha denunciado que la falta de acceso equitativo al mercado mundial de las vacunas contra el coronavirus ha impedido salvar "las vidas de decenas de miles personas".
"La COVID-19 nos demostró que hay situaciones y amenazas que no reconocen fronteras ni categorías, que todos los Estados del mundo somos vulnerables y que no estamos preparados para enfrentarlo global, pero sobre todo solidariamente", ha agregado Giammattei.
Solución definitiva con belice
Por otra parte, el presidente de Guatemala ha mostrado ante la Asamblea General de la ONU su predisposición a negociar una "solución definitiva" para el desacuerdo sobre la soberanía territorial que enfrentan a su país con Belice desde el siglo XIX.
"Guatemala está comprometida a resolver de manera permanente y definitiva ante la Corte Internacional De Justicia (CIJ) el diferendo territorial, insular y marítimo", ha detallado Giammattei, según ha recogido 'República'.
Desde 1859, Guatemala reclama la soberanía de 11.030 kilómetros cuadrados, así como la de centenares de islas e islotes que estaban en poder de la corona británica y Belice, que los gobierna, reivindica como propios desde su independencia, en 1981.
Habitado originalmente por pueblos maya antes de la llegada de los europeos, Belice formó parte de la Capitanía General de Guatemala bajo el imperio español pero el territorio fue ocupado por piratas ingleses y finalmente Reino Unido se hizo con su control en una breve guerra.
Belice, que actualmente cuenta con 375.000 habitantes, se independizó en 1981. Guatemala lo reconoció como Estado independiente años después, en los 90, pero nunca ha aceptado sus fronteras porque reclama unos 11.000 kilómetros cuadrados, casi la mitad del territorio beliceño.