El presidente de Brasil ve la reducción de los tipos de interés como "una pelea eterna"
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha lamentado este miércoles que conseguir que se recorten los tipos de interés sea "una pelea eterna" en el país, en una clara crítica a la última decisión del Banco Central de Brasil de mantener la tasa de política monetaria en el 10,5%.
La entidad optó por esta estrategia el pasado 1 de agosto, alegando que el incierto escenario global y el escenario interno de inflación exigen "un seguimiento diligente y una cautela aún mayor".
Frente a esta situación, Lula ha reprochado que el recorte de los tipos sea una pelea eterna y ha argumentado que lo importante para que la economía crezca es "la circulación del dinero".
En su última reunión de agosto, la entidad ha apuntado que el entorno externo sigue siendo adverso, debido a la incertidumbre sobre los impactos y el alcance de la flexibilización de la política monetaria en Estados Unidos y la dinámica de la actividad y la inflación en varios países.
En el ámbito interno, si bien la actividad económica se mantiene resiliente, las proyecciones de inflación están en aumento y las expectativas se encuentran desancladas.
El presidente de Brasil lleva meses con críticas al banco central y a su presidente, Roberto Campos Neto, respecto a la posición adoptada de política monetaria. En numerosas ocasiones le ha acusado de actuar por intereses políticos y en favor de unos pocos, frente a las clases más pobres que necesitan inversiones y que se acelere el consumo.
"¿El banco central tiene necesidad de mantener la tasa en el 10,5% cuando la inflación está en el 4%? ¿El banco tiene en cuenta que las personas están teniendo dificultades para lograr financiación? Continuo criticando los tipos de interés", expresó en junio el mandatario brasileño, antes de la reunión celebrada dicho mes.