El papa francisco visita chipre con los migrantes en mente
Por Michele Kambas
NICOSIA, 30 nov (Reuters) - El Papa Francisco visitará esta semana Chipre para prestar su apoyo a una isla azotada por el conflicto y ahora en primera línea de una nueva ruta migratoria de personas que huyen de sus países hacia Europa.
En el centro de Nicosia, nada refleja mejor la afluencia de inmigrantes que el pequeño patio de la iglesia de la Santa Cruz. Cada mañana, los inmigrantes hacen cola para recibir ayuda y asistencia de una organización benéfica católica.
Los trabajadores humanitarios dicen que la situación es abrumadora. Francisco, que ha hecho de la defensa de los inmigrantes y refugiados una piedra angular de su papado, ha dispuesto que 50 inmigrantes sean reubicados en Italia después de su viaje de esta semana.
El 3 de diciembre tiene prevista una oración ecuménica con los inmigrantes en la Santa Cruz, tras la misa en un estadio al aire libre que oficiará en Nicosia por la mañana.
"Pienso en aquellos que, en los últimos años, y todavía hoy, huyen de la guerra y de la pobreza, llegan a las costas del continente o a otros lugares y no encuentran hospitalidad, sino hostilidad e incluso explotación", dijo Francisco en un mensaje de video antes de su visita. "Son nuestros hermanos y hermanas".
Además de su proximidad a la inestabilidad de Oriente Medio, Chipre se encuentra en una situación delicada por su propia y compleja geopolítica. Dividida entre los grecochipriotas y los turcos, tiene una porosa línea de alto al fuego de 180 kilómetros que la separa de este a oeste y que ha sido usada por los traficantes de personas como puerta trasera hacia el sur.
Sólo este año, más del 90% de los que llegaron al sur utilizaron esta ruta.
"Ahora mismo estamos desbordados por el número de inmigrantes, solicitantes de asilo y refugiados que están aquí en Chipre", dijo Elizabeth V. Kassinis, directora ejecutiva de Cáritas Chipre, que forma parte de una red mundial de organizaciones católicas de socorro y ayuda.
Muchos tienen la esperanza de que el Papa les traiga días mejores. "El Papa puede cambiar muchas cosas porque representa a Jesucristo (...) si sigues a Dios no puedes perder nada", dijo Antoinette Ndjikeu, de 50 años, procedente de Camerún.
(Reporte de Michele Kambas; editado en español por Gabriela Donoso)